SANTO DOMINGO, RD.- El empresario Wilfredo Cabrera, vicepresidente de la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios (CONFENAGRO), mostró preocupación debido a que aún no se ha decidido de que los productores puedan tener un lugar en el Merca Santo Domingo, pendiente de apertura.

“Eso nos muestra a nosotros con mucha preocupación, y ahí es que están los problemas. Se supone que un mercado de productores debe estar integrado por los productores, y no por intermediarios”, explicó.

Dijo que no es de dudar de que muy pronto en las instalaciones del Merca Santo Domingo, que se erige en la autopista Duarte, estén intermediarios que vayan a ocupar esas plazas, pero no los productores.

“Eso no sería raro para nosotros, porque esa es la costumbre de nuestro país”, criticó Cabrera, ex presidente de la Comisión Avícola Nacional y de la Asociación de Pequeños y Medianos Productores de Pollos y Huevos de Licey y Moca.

El pasado 11 de marzo, durante una visita a Constanza, el Presidente Leonel Fernández anunció que en un plazo de 45 días, a partir de esa fecha, sería inaugurado el Merca Santo Domingo, con un área de un millón de metros cuadrados y ubicado en el kilómetro 22, en las proximidades de la autopista Duarte.
En la ocasión, el gobernante prometió un espacio para que los productores de Constanza comercialicen directamente sus rubros.

Respecto a la situación del negocio de los huevos, dijo que un cartón está costando en granja entre 93 y 94 pesos, pero que se está vendiendo a más del doble.
“Cómo es posible que toda parte de producción cueste 94 pesos, y tenga que gastar el doble solamente por llegar esos huevos a las casas de las familias dominicanas”, se preguntó.
Cabrera dijo que es improcedente que nadie haya pensado, especialmente en el sector oficial, en buscar una salida a esa situación.
“Esa ha sido la costumbre. Le bajaron de 400 a 500 puntos a un millar de huevos sin tomar en cuenta que el consumidor no sale beneficiado. ¿Dónde se queda ese dinero? En la parte de intermediación”, refirió.
Consideró que mientras el productor va descapitalizándose, el consumidor no sale beneficiado de esa práctica.