Santo Domingo,RD- Ellos saben que son queridos y se aprovechan de ello. “Yolandita Monge y Anthony Ríos: 25 años después”, trajo a dos intérpretes que, con la excusa de la relación sentimental que tuvieron hace ya un cuarto de siglo, presentaron un espectáculo, entretenido, divertido y sobretodo, lleno de romanticismo.

Anthony y Yolandita, cada uno con su estilo, sacaron partido a sus virtudes sobre el escenario, algo que aderezaron con las graciosas anécdotas de una relación que ambos ventilaron, en el oficio que escogieron para vivir, cantando.

El primero en llegar fue Anthony Ríos, cargando sus canciones y esa personalidad, de la que según ha dicho: “He tratado de ser yo mismo; ¡y brega que me ha dado”! Nacido en Las Cañitas, Sabana de la Mar, hace 61 años, el intérprete echó manos de sus composiciones, y entre una y otra, conversaba con la audiencia, con gracia, encontrando la complicidad de un público que lo conoce y lo admira.

Ríos, personificación del bohemio, bebedor, enamorado, mujeriego, ícono de la cultura popular dominicana que en este show reflexionó sobre la edad, el sexo y las relaciones de pareja. Sobretodo de la que tuvo con Yolandita Monge.

Ella llegó después. Si él tiene el encanto de la palabra, que no necesita ser un gran cantante, ni tener una bonita figura en su propuesta escénica, Monge, a pesar de su pequeño tamaño, llenó con su presencia, su voz y su gestualidad, el espacio de la sala Carlos Piantini del Teatro Nacional Eduardo Brito.

Con su capacidad histriónica, la cantante, nacida en 1955 en Trujillo Alto, Puerto Rico, despachó cabizbajo a Ríos, cantándo para él, la canción “Amnesia”, de Chico Novarro, y que José José popularizó.

Monge, mostró una personalidad juguetona, sexy y elegante, dando entonación y dramatismo en ocasiones (“La distancia”, “Señor del pasado”) y alegría y baile (“Mi guachimán”, “Yo quiero andar”).

“Yolandita Monge y Anthony Ríos: 25 años después”, es un espectáculo romántico que emociona y divierte, pero que además sirve como terapia de parejas.

En ese sentido, al final del recorrido de dos horas que es el show, con la canción final le dicen al público que aproveche las oportunidades que les da la vida al poner a una persona a su lado.

Llaman a las parejas, a base de sus mejores canciones y de la conversación con la audiencia, a que no hacer como ellos, que se perdieron el uno al otro.