Santo Domingo,RD.- Ella trajo a la pantalla otra tragedia. La del valor amatorio. La del sentimiento sublime. Kate Winslet en “Titanic” convirtió en símbolo antidogma la validez emocional. La belleza de su pasión, muy superior a su propia belleza física, ha quedado en la historia del cine moderno como prueba de la validez sentimental por encima de los intereses materiales.

Desde ese ángulo, ella lo fue todo. Guió la puesta en escena como si fuera la capitana del Titanic y lo sacó a flote a pesar de su “hundimiento”.

James Cameron halló en ella a la actriz adecuada para trasmitir la honestidad de principios y lo valioso de luchar en favor de un sentimiento cuando es auténtico.

El famoso director norteamericano aprovechó la catástrofe civil más grande de la historia para trasmitir, a través de ella, una historia de amor inolvidable que deberá perdurar mientras el cine exista.

Es una película valiente por su contenido, esmerada en su factura y novedosa desde el ángulo de que trata un tema que no es nuevo en la historia de la cultura universal. Cineastas, novelistas, poetas y pintores se han inspirado en los impulsos afines que crean los amores imposibles para readmitir la valentía en las parejas que se atraen.

Cameron da fe al amor a primera vista y en ese juego de imágenes donde el sentimiento va más allá que la alegoría circunstancial, puso en manos de esta hermosa rubia británica un metamensaje en contra del tradicionalismo, la cobardía y los mezquinos intereses que se mueven en detrimento de las relaciones afectivas.

Kate Winslet seguirá inspirando con su personaje la necesidad de escuchar los dictados del corazón hasta las últimas consecuencias. Nos ha dejado una lección que se agradece en tiempos en que se creían perdidas tales dimensiones humanas.

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UNA TRAYECTORIA EXITOSA EN PANTALLA

Kate Elizabeth Winslet nació el 5 de octubre de 1975, en Reading, Inglaterra.
Además del cine, ha sido intérprete de música popular.

La han distinguido con los más prestigiosos reconocimientos del medio cinematográfico, televisivo y musical. En 2008 ganó el premio Oscar a la “mejor actriz” por su papel en “The Reader”, convirtiéndose en la más joven en conseguir más nominaciones en dicho premio (seis en total).

Ha sido aclamada por sus diversas intervenciones en el cine, ya sea en el drama o en la comedia, y en grandes producciones de Hollywood, hasta pequeñas películas independientes.