DE59CDEC-5FB8-4B2A-8795-C0BD42252155.jpg__600__450__CROPz0x600y450SANTO DOMINGO.- El club Mauricio Báez reconoció este martes al merenguero Johnny Ventura como “Mauriciano de Siempre”, en la celebración del tradicional Desayuno de la entidad cultura y deportiva, que en esta oportunidad se celebró por ocasión de su 52 aniversario.

El homenaje a la gloria del merengue, el arte y la cultura fue el colofón actividad que cada año celebra la institución dentro de su semana aniversario.

Ventura recibió una placa de parte de la directiva del club que preside José -Boyón- Domínguez, acompañado por los asesores Leo Corporán y Nelly Manuel Doñé.

El artista definió el homenaje como un motivo de gratitud plena que recibía con humildad y alta distinción.

Sin embargo, aseguró que distinciones “como estas desbordan la copa de la vanidad de cualquier persona y yo no soy la excepción”.

El popular merenguero consideró que los responsables de Mauricio Báez se equivocaron de personaje dedicándole el Desayuno, al manifestar que “los que deben ser honrados de manera permanente son ese grupo de hombres y mujeres que hace 52 años comenzaron a desafiar las adversidades del tiempo, aferrados en un sueño que hoy debe ser emulado por los jóvenes de nuestro país”.

Johnny Ventura dijo que el club Mauricio Báez es un monumento a la esperanza y la tenacidad, a las luchas por el bien colectivo. Al recibir el homenaje, pidió a los presentes un aplauso caluroso a los ideólogos y forjadores de la organización deportiva situada en el corazón de Villa Juana.

“Si la juventud de nuestro país tomara la bandera mauriciana, hurgara su historia y la enarbolara para emprender proyectos a favor de los pueblos, de seguro que otro fuera el sendero de esta nación”, indicó.

Ventura fue reconocido por sus aportes al Mauricio Báez desde su profesión de cantante, labor que dijo realizaba de manera honorífica porque consideraba que era su deber ayudar a una entidad que luchaba para formar valores y desarrollar una comunidad.

“Además de un deber, era obligatorio y forzosamente ponerse al lado de una organización que luchaba por el bien común”, afirmó Ventura, quien tocaba de forma gratuita para que el club pudiera conseguir recursos para cumplir con las obligaciones de dar el pan de la enseñanza del deporte, la educación, el arte y la cultura a los pobladores de Villa Juana y sectores aledaños.