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Por Ramón Mercedes

 

Nueva York.- La fiscalía de El Bronx anunció este martes en la Corte Criminal de ese condado que por ahora solo acusará a los dominicanos Garivaldi Castillo y Julio Salcedo, por cargos de asalto en primer y segundo grado.

 

Ambos fueron apresados en conexión con la explosión ocurrida el pasado 27 de septiembre en la vivienda 304 W de la calle 234, en el sector de Kingsbridge, donde murió el capitán de bomberos Michael Fahy y herir a unas 20 personas.

 

La asistente de la fiscalía, Christine Scaccia, que anteriormente había dicho que serían acusados de asesinatos, varió su intención en Corte y expresó que los instruirá de cargos de asalto, a pesar de que la escena del crimen aún está activa y los cargos podrían ser elevados.

 

Salcedo apareció en audiencia con una camiseta gris con cuello y pantalones blancos, mientras que Castillo llevó un uniforme marrón claro. Ambos se negaron a declarar ante un gran jurado y deben regresar a corte el próximo 19 de octubre. Permanecerán detenidos sin derecho a fianza.

 

La sala del tribunal estaba llena de bomberos, y el Jefe del Batallón 14, Daniel O’Donnell, dijo que había estado allí para mostrar su apoyo a Fahy. “No tengo sentimientos reales hacia ellos, subrayó.

 

El abogado de Castillo, Francisco Serrano, minimizó la cantidad de marihuana que había en el edificio. “Eso no es nada”, dijo el pasado fin de semana.

 

Afirmó que los funcionarios no tenían vínculos sustantivos entre las acciones de Castillo y la muerte del capitán de bomberos, argumentando que el dominicano no debe ser acusado de asesinato debido a una fuga de gas y que los funcionarios se apresuran en culpar a su cliente. “Esta es una carrera para decirle al Bronx, a la gente en los Estados Unidos, “estamos por encima de todo”, sostuvo.

 

Mientras que Alexander Sánchez, un abogado criminalista en El Bronx no vinculado al caso, sostuvo que estaría muy sorprendido si la fiscalía a última instancia impone cargos de asesinatos a Castillo y Salcedo.

 

“Me parece que hay una distancia tan grande entre lo que estos chicos estaban haciendo mediante el bombeo de gas para calentar el lugar y una explosión que hizo volar parte de un edificio a distancia y golpear al bombero”, dijo.

 

“Es un imprevisto y no hubo ningún intento por parte de ninguna persona para cometer un daño en contra de nadie”, precisó.