CATALUÑA, España.- (Tomado de ABC).- Alberto Dasca de Moxó, abogado, y María Pilar Salat Bordiu, directora de operaciones de la cadena de Derby Hoteles, matrimonio residente en Barcelona, viajaron a primeros de enero a Punta Cana, República Dominicana, un cóctel de sol y ron que acabó en mal trago.
El pasado sábado 15 de enero, cuando estaban en el aeropuerto de Santo Domingo, sentados en el avión de Air Europa que les iba a traer de regreso a España, a Alberto le hicieron bajar para identificar su maleta. «Pensé que era porque habíamos comprado una botella de licor…», explica a ABC.
En el aeródromo, nuestro abogado entró en una sala llena de policías.
Allí le muestran unas maletas negras y le preguntan cuál es la suya. «Ninguna», repone. Entonces, un agente le pide el resguardo de equipaje y resulta que coincide con una de las maletas negras. Las abren y quedan al descubierto 68 kilos de cocaína.
El coronel de la Dirección Nacional de Control de Drogas de la policía dominicana (DNCD), explicó a Alberto sus sospechas: que alguien había sustraído los códigos de barras de sus maletas y las había puesto en las que contenían droga. Una hipótesis, no obstante, que debía confirmarse hallando las auténticas maletas de Alberto y Pilar. La tarea llevó horas.
Aclarado todo, tras atender a las pregunta de un fiscal desplazado al aeropuerto, se quedaron sus pasaportes, les dejaron irse a dormir a un hotel y les citaron para la mañana del día siguiente para declarar por escrito. Ese domingo por la tarde ya volaban rumbo a casa, libres e inocentes.
Pese a todo, quedaron «encantados» con el buen trato recibido por parte de las autoridades policiales, que se excusaron, y por eso al llegar a España buscaron sus datos para mandarles un «e-mail» de gracias. Y entonces, «otro susto». En la web de la DNCD se encontraron con un comunicado que daba cuenta del hallazgo de la maleta con cocaína y de varias «detenciones», como las de empleados del servicio de «handling» del aeropuerto caribeño, y como «la de los españoles Alberto Dasca de Moxó y María Pilar Salat Bordiu». Tal cual. La nota había sido rebotada por varios medios dominicanos, por lo que la infamia se extendía en todo internet.
Alberto pidió a la Embajada de España en Santo Domingo que mediara para lavar su imagen y, finalmente, la DNCD emitió el pasado domingo un comunicado de rectificación. Además, ha enviado «e-mails» a los medios dominicanos que en su día les difamaron para que hagan lo propio. El problema es que en internet conviven ahora noticias en que Alberto y Pilar son culpables, con otras en que son inocentes. Internet no perdona.
Llegados aquí, Alberto espera que el caso se diluya en la Red, pero pide una compensación a Air Europa «por no controlar bien las maletas».