SANTO  DOMINGO, RD.- El presidente de la Fundación de Militares  Constitucionalistas,  Andrés Fortunato este martes al conmemorarse el 47 aniversario de la Revolución del 1965, que valió la pena esa gesta histórica, porque después de ese día no se ha producido otro golpe de Estado en la República Dominicana. El comandante de la Revolución del 1965 indicó al depositar una ofrenda floral en el Altar de la Patria, acompañado de decenas de constitucionalistas y funcionarios, que la población sabe que desde el 1844 al 1965, un gobierno subía y otro lo deponía, aunque no negó que hubiera intentona de un golpe de Estado, pero que al final no se produjeron.

Sin embargo, dijo que a partir del 1965, se ha hecho conciencia de que hay que respetar la voluntad popular de la población.

Asimismo, Fortunato lamentó que esa voluntad popular no pudo llegar al poder en el 1965 como querían los constitucionalistas, porque  con la llegada de los americanos el 28 de abril se  liquidó  la posibilidad de que la Constitución y el profesor Juan Bosch regresarán al poder en el 1965.

Pero se quejó también que la contraparte ha hecho su trabajo negativo, desviando al pueblo dominicano de sus verdaderos intereses patrióticos, que son respetar a las instituciones y a las leyes para que no haya corrupción; para que no haya narcotráfico y no aumente la delincuencia.

Andrés Fortunato dijo que la nueva generación de jóvenes dominicanos no tiene latente lo que pasó en la guerra del 1965, porque se hizo un plan de contingencia para enterrar  la memoria de abril.

Rechazó la posibilidad de que en estos momentos haya un golpe de Estado, y sentenció que si alguien lo está pensando, se encontrará con la fuerza del 1965.

Manifestó con énfasis que si hay una dictadura en la República Dominicana, lo invitó  a recordar como salieron ajusticiados el 26 de julio del 1899, Ulises Hilarión Heureaux Lebert, mejor  conocido como Lilís y Rafael Leónidas Trujillo el 31 de mayo del 1961.

Destacó que la libertad que sembraron los Padres de la Patria, refrendada por la restauración no será quebrantada por nadie “y si alguien lo intentase pagará muy caro las consecuencias”.

De su lado, la viuda de Francisco Alberto Caamaño Deñó, Vicenta Vélez al depositar también una ofrenda floral frente a la estatua del extinto líder llamó a los jóvenes dominicanos  a ser entes de cambio y a tomar las riendas de la sociedad.

“Nuestros  jóvenes van a contar con todo nuestro apoyo y experiencia”, dijo.

Expresó que el nombre de Francisco Alberto Caamaño Deñó está representado en el deseo de un pueblo que busca su libertad.

La viuda de Caamaño estuvo acompañada  de parientes del líder y otros ciudadanos miembros de la Fundación Caamaño.