ANTONIO MARTESANTO DOMINGO,RD.– La Confederación Nacional de Organizaciones del Transporte , CONATRA, rechaza que la Dirección General de Aduanas , y otras autoridades del Gobierno apliquen un impuesto a la compra por Internet de menos de US$200, porque el gravamen significa una nueva alza a las piezas y repuestos que compran los transportistas y choferes, y se traducirá una nueva carga económica para los usuarios del servicio.

CONATRA , advierte que si el Gobierno permite que a partir del 15 de este mes, la compra por Internet inferior a los US$200 pague impuesto, la ciudadanía tendrá que pagar pasajes más caros, ya que deberán adquirir repuestos con nuevos tributos.

El presidente de CONATRA, Antonio Marte, dijo que se los cientos de miembros de esa Federación se oponen a que la DGA, Hacienda y la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) insistan en cobrar por la compra por Internet que estaba exenta de impuestos, y que como señalan juristas, el Decreto 420 que se presente aplicar, para generar una nueva recaudación, viola la Constitución Dominicana, varias leyes y el Tratado de Libre Comercio (DR-CAFTA), con el que los transportistas esperaban tener mejores condiciones de trabajo

“El impuesto a la compra Internet de menos de US$200 nos perjudica notablemente, porque muchos de nuestros afiliados compran repuestos que por Internet que no aparecen en el mercado nacional y ese impuesto va a incrementar los costos operacionales del transporte”, enfatizó Marte.

Dijo que este nuevo impuesto pautado a partir del 15 de agosto se convierte en una carga, adicional, por lo que afirma que el Gobierno tendrá que sentarse a tratar el tema con el sector transporte, sobre todo, porque eleva sus gastos junto a los incrementos semanales que asumen por el alza de los combustibles, básicamente el gasoil, y los reajustes que siempre experimentan los neumáticos y otros insumos.

Advirtió el transportista que el Gobierno le da otro golpe al bolsillo de los dominicanos y perjudica a los choferes, más aun a los usuarios del transporte público de pasajeros, a los trabajadores que ganan salarios de miseria y a los chiriperos del sector informal, que son los que pagan los aumentos de los pasajes que habrán de venir por la aplicación de impuestos a la compra por Internet.