La Cámara desarrolla la iniciativa junto a USAID e involucra al sector empresarial con las escuelas públicas con la idea de contribuir con la mejora de la calidad de la enseñanza
SANTO DOMINGO,RD.’.- El Comité de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) de la Cámara Americana de Comercio (AMCHAMDR) celebró un encuentro-panel en el que empresarios y directores de escuelas que forman parte de su Programa de Educación Básica narraron, en un panel, sus experiencias como actores clave de la iniciativa.
La actividad, en la que participaron cerca de 175 personas, tuvo lugar en la mañana del miércoles 2 de mayo en el Hotel El Embajador, en Santo Domingo, y en ella tomaron parte altos cargos del Ministerio de Educación. Entre ellos, Minerva Vincent, Viceministra de Asuntos Técnicos y Pedagógicos. La Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), aliada estratégica de AMCHAMDR en el desarrollo del programa, estuvo representada por su oficial de Educación, Jana Wooden.
La parte final de la actividad, durante el almuerzo, estuvo protagonizada por Antonio Caparrós, Director Ejecutivo de Fundación INICIA, quien dictó una conferencia sobre educación e inversión privada. Antes, Liliana Cruz, Gerente de RSE de AMCHAMDR, presentó el Programa de Educación Básica a los presentes.
El encuentro comenzó con las palabras de representantes de las organizaciones involucradas en el programa. Julio V. Brache, Presidente de AMCHAMDR, dijo en su intervención que “nuestro involucramiento con la educación está relacionado con nuestro deseo de contribuir con la reducción de la inequidad social, debida en parte al limitado acceso que ha existido y aún existe en nuestro país a la educación de calidad”. También se refirió al costo adicional que está teniendo que pagar el sector privado para recapacitar a su personal en habilidades básicas que debieron haberse desarrollado en la etapa escolar. “Es en la educación básica, precisamente donde hemos decidido actuar, en la que se desarrolla la estructura de pensamiento y de motricidad, así como la capacidad de análisis”.
Brache agradeció la colaboración de USAID como aliado estratégico del programa y del Ministerio de Educación por el apoyo recibido. “AMCHAMDR es el puente para conectar la inversión privada con las escuelas públicas. Sabemos de educación, conocemos lo que necesita el sector privado y aseguramos que sus intervenciones se correspondan con una cultura de Responsabilidad Social Empresarial brindando resultados tangibles y, ante todo, sostenibles”.
Previamente se había dirigido a los presentes William Malamud, Vicepresidente Ejecutivo de AMCHAMDR. “La educación no es un lujo, es más que un derecho humano. Es el fundamento de una democracia sostenible y fuente para la competitividad en una economía mundial. Esa es la inspiración de nuestro interés como institución en construir sólidos fundamentos para cada niño; y de ese modo crear las bases para una sociedad sostenible, próspera y democrática”, dijo Malamud.
Jana Wooden, oficial de Educación de USAID, dijo en su intervención, antes del panel, que “un país que cuenta con una buena educación puede sobrepasar muchas barreras. Destinar recursos, tiempo y esfuerzo para la educación es una buena inversión. De hecho, la mejor inversión es en la educación”. Dijo creer que los presentes en el encuentro “reconocemos que la educación es un bien público que debe estar disponible de forma equitativa para los ciudadanos. Para que exista verdadera igualdad, los niños y las niñas más pobres deben tener acceso a una educación de la misma calidad que la que reciben los demás”. E hizo referencia al sector privado cuando afirmó que para poder competir en una economía cada vez más globalizada, “la República Dominicana necesita tener una fuerza laboral mejor preparada. En busca de esta mejoría, los empresarios unidos pueden hacer una diferencia, reclamando una fuerza laboral con un nivel adecuado”.
MInierva Vicent, viceministra de Educación, expresó que la función principal de la escuela como institución social “debe ser el resultado de un consenso de la sociedad a la que sirve como formadora de habitantes. Todos los actores y sectores productivos de la sociedad dominicana están vinculadas de alguna manera al sistema educativo”. Asimismo, resaltó que “la contribución de la inversión privada en educación juega un rol de alta significación para obtener avances y correcciones”. En este sentido el Ministerio “valora las diferentes iniciativas que han surgido desde la empresa privada, orientadas en el marco de una responsabilidad social, al mejoramiento de nuestro sistema educativo”.
Panel socios Programa de Educación Básica
La esencia del encuentro entre directores de escuelas públicas y empresarios fue plantear desde sus perspectivas las motivaciones del sector privado para apoyar el sector de educación. Entre los panelistas se encontraba Pedro Esteva, presidente de Implementos y Maquinarias, quien expuso sobre su experiencia en el apoyo a programas de educación que desarrolla AMCHAMDR. “Elegimos educación como forma de devolver lo que habíamos recibido. Uno trata de lograr una mejor sociedad, con una brecha más pequeña entre quienes poseen conocimiento y quienes saben menos y tienen menos oportunidades para insertarse en la vida laboral. También es un tema de competitividad con otros países. La educación tiene incidencia importantísima en nuestra capacidad de competir, ahora que además tenemos tratados de libre comercio” apuntó.
“Estamos relacionados con tres escuelas, dos de ellas en Guachipita y una en Gualey, en las que colaborábamos desde hace años con infraestructura, entendimos que se podía hacer la diferencia a través del conocimiento y así dar acceso a mejores empleos. Ha sido fácil hacer el aporte para que los profesionales de AMCHAMR y USAID lo manejen, y sentimos que cada centavo aportado es bien invertido. Han sido entrenados los docentes, tienen mejores bibliotecas y centros de tecnologías, hay actividades extracurriculares y en ellas se ha despertado la esperanza” puntualizó Esteva.
Otra de las empresas participante en el panel fue la Fundación Propagas, su representante Claudia Catrain, invito a las empresas para que funcionen con acompañantes de los directores de las escuelas para que estos se empoderen. “Deben ser los actores claves para exigir sus derechos y ser proactivos para trabajar en los cambios que demandan sus instituciones” agregó.
Por su parte San Diego Padre expuso sobre sus experiencias cuando decidió instalar su academia en el país que en principio pasaban por la escuela y decidieron involucrarse con ella. “El equipo es de la comunidad y para la comunidad, es la premisa, y por eso hay que enseñar a los jóvenes por su importancia para el juego” expresó Verónica Nogueira, representante de la academia.
“Se trabajo con la infraestructura, pero lo importante era la calidad de la educación y la motivación para maestros y alumnos, con el consecuente impacto en la comunidad. Empezamos a trabajar con talleres a maestros y niños y año a año se ha ido involucrando a una nueva escuela en el área y para nosotros es importante porque nos han recibido muy bien con el deporte”. Indico que no solo se requiere mejoras en infraestructura sino “mejoras en contenido y hemos podido combinar objetivos de nuestra empresa con los de la AMCHAMDR y los de las comunidades” puntualizó Nogueira.
Además, los directores de las escuelas públicas expresaron el valor de los aportes que realizan las empresas para apoyarles en diversos aspectos en sus escuelas. El director de la Escuela Básica Brisa Caucedo, Luciano Civil, sin palabras para describir lo que ha supuesto el programa. Habla de cómo hay madres que también son padres, y eso dificulta un poco más la labor. Pero la presencia de empresas ha facilitado que los niños vean la escuela como un hogar. “Gracias al aporte ha habido talleres que mejoran la calidad de nuestra educación. Y también ayuda recibir los útiles escolares. Las herramientas de desarrollo están en la educación” valoró el Civil.
Todos los panelistas valoraron de forma positiva los aportes que tiene la coordinación realizada por AMCHAMDR y USAID. Su trabajo contribuye para que sistemáticamente se pueda apoyar a las escuelas y poder capitalizar los recursos de las empresas privadas a este importante sector.
Para finalizar el encuentro se presentó la ponencia de Antonio Caparrós, director ejecutivo de la Fundación INICIA, quien expuso sobre la inversión privada en educación. “En INICIA desarrollamos modelos financieros que nos permiten tomar decisiones. Tratamos de medir qué supone un año más de escolaridad. Invito a AMCHAMDR e inversionistas a que calculen el retorno social sobre la inversión y que midan todo. Eso va a ayudar a tomar mejores decisiones”.
“Este proyecto tiene que tener mayor impacto en el modelo educativo. Lo que han hecho está creando impacto y quedarse en lo que han hecho no es suficiente. Y nos ofrecemos para colaborar y que crezca. Es un proyecto serio y probado y que le puede hacer muchísimo bien al sistema educativo. Y da resultados porque la variable que más influencia tiene es la docente: esa es la mayor inversión” refiriéndose al programa de educación básica que desarrolla AMCHAMDR con USAID.
Exhortó a “mejorar la tendencia de nuestros indicadores educativos ayuda a mejorar el riesgo país. Hay 12 factores del ranking de competitividad que miden y siete están amarrados directamente al sistema educativo. Un mejor sistema educativo lleva a un país a estar mejor posicionado en ranking de competitividad”.
