Evaristo Yánez (1)BAVARO – PUNTA CANA.- República Dominicana necesita avanzar en sus procesos de logística como forma de dar cabida a los 10 millones de turistas al año que el país espera recibir en una década, manifestaron Evaristo Yáñez y Julio Fernández en la charla “Impacto de la Logística en la Industria Hotelera”.

Los especialistas sostuvieron que la logística supone la gestión de todo el proceso turístico e incluye la planificación de temas como transporte, construcción de almacenes, vías públicas, seguridad y control de calidad, entre otros aspectos.

Hay una necesidad de que la logística, entendida como el puente o nexo entre la producción y el mercado, soporte el crecimiento del turismo dominicano, plantearon Yáñez, director comercial de Syncro Logistics, y Fernández, Regional Sales Manager de EMOtrans, al participar en la Exposición Comercial de ASONAHORES 2015.

Se necesita que las empresas del turismo respondan a las necesidades de cada una de las etapas del proceso turístico, aseguraron.

Los especialistas presentaron las ofertas especializadas de sus empresas para apoyar las operaciones y proyectos de hoteles, restaurantes y comercios.

Entre las soluciones ofertadas se hallan transporte internacional y logística, transporte local, gestión aduanal en destino, entregas a domicilio, manejo de órdenes de compra, servicios de inventarios a corto y a largo plazo. También, manejo de acopio y consolidación, empaque especializado para carga delicada, material-maquinaria para construcciones, muebles, accesorios, repuestos & equipos, así como suministros operativos y equipos.

Es fundamental que haya una mejor planificación, plantearon Yáñez y Fernández. Sus empresas – explicaron – se involucran desde la fase de planificación de los proyectos, sus diferentes fases, materiales a ser transportados, los artículos y aspectos que exigen un tratamiento especial, al tiempo que evalúan las regulaciones aduaneras de los países de destino.

Es difícil ser exitoso sin tener una buena logística, afirmaron, e incluyeron aspectos como el conocimiento de las leyes aduaneras, las regulaciones, el buen manejo del departamento de compras y, por ejemplo, las relaciones con las agencias gubernamentales, nacionales y regionales.