COTUI, SANCHEZ RAMIREZ.–  El Síndico Municipal de Cotuí, Rafael Molina, la emprendió incomodo y de manera ofensiva contra un reportero en la rendición de cuentas de su gestión efectuada en auditorio del Palacio Municipal de aquí, efectuada el viernes 24 de junio, luego de que corresponsal hiciera una pregunta sobre la aprobación de un préstamo bancario y el manejo dado a los fondos del Ayuntamiento cotuisano.

Raúl Moreno Cárdena, reportero de Telemicro Canal 5, en pleno ejercicio de sus funciones de reporteo mientras cubría las incidencias en la asamblea de rendición de cuentas que ante los cuestionamientos de organizaciones comunitarias y de la sociedad civil convocara el Alcalde de Cotuí, Rafael Molina, y tras el informe económico rendido por el administrativo del cabildo, se atrevió a cuestionar la actual gestión del Ayuntamiento, lo que irritó y sacó de casilla al Síndico municipal hasta el punto que lo único que le faltó que le dijera a dicho reportero fue “barriga verde”.

“El ayuntamiento tiene una cuenta a plazo fijo en BanCotuí; hicieron una reunión parte de los Regidores y el Síndico, vía telefónica, ¿a qué se que en esa reunión aprobaran un préstamo de $10 millones de pesos para construir las obras y las obras están paralizada aquí en Cotuí?”, preguntó Raúl Moreno Cárdena.

“¿Pero de qué usted está hablando? Yo quiero que usted se edifique primero y busque los datos sobre eso, investigue primero para que usted venga a tirarme preguntas por el cuello de cosas que son inciertas. Y me voy a permitir, déjeme decir que con esa necedad con que usted está tratando al Ayuntamiento“ respondía exaltado y evidentemente fuera de casilla Rafael Molina, al momento que Moreno Cárdena le corrigió.

“Necedad no, yo a usted no le he faltado al respeto¨, le aclaró Moreno Cárdena, “¿Dónde están los 24 millones?  ¿Dónde están los $15 millones?”, insistía en cuestionar el reportero y mientras el Alcalde Molina lo tildaba de necio él mantenía sus cuestionamientos a viva voz.

“Necedad, necedad porque usted faltó al respeto, oiga lo que le voy a decir, escúcheme, usted falta al respeto cuando falsea una cosa que no es cierta.  Oígame, usted está hablando mentira, usted va al banco e investiga, yo no voy a discutir con usted”, respondía en forma acusatoria Rafael Molina.

“A los comunicadores”, siguió respondiendo Molina, “lo más grande es uno ser analfabeto para uno hacer preguntas y usted primero tiene que tener información para hacer una pregunta.  Mi primera carrera fue ser periodista y fui honesto y fui serio en mi carrera, para que usted venga de manera baja a hacerme ese tipo de preguntas que no vienen al caso; que no vienen al caso porque usted tiene que hacer la investigación primero.  Primero investigue y luego usted hace la pregunta que usted entienda que debe de hacer, pero deje de estar desinformando a la población con cosas que no son ciertas” sostuvo Molina.

En medio de la andanada de descalificativos que a todo pulmón y en plena asamblea comunitaria pronunciaba Rafael Molina contra Raúl Moreno Cárdena, un agente de la Policía Nacional y policías municipales bajaron y se le aproximaron al reportero, colocándose a dos metro de distancia en actitud que no pareció que era para aconsejarle.  Por suerte las cosas no pasaron de ahí, ya que a pesar de la rudeza del trato y la desconsideración de Rafael Molina hacia el reportero, éste se limitó a jugar su rol correspondiente.

No es la primera vez que el Síndico Municipal de Cotuí responde con rudeza y la emprende contra los periodistas que cubren las fuentes.  Se recuerda que recientemente, en un recorrido  por algunas de las obras que construye el Ayuntamiento Municipal, Rafael Molina calificó como necedades las los cuestionamientos que le hacen algunos comunicadores a sus ejecutorías al frente de la entidad edilicia, claramente irritado por las preguntas que les hacen los periodistas, quienes se hacen eco de los cuestionamientos crecientes de munícipes y organizaciones comunitarias a su gestión, quienes dicen realiza reuniones irregulares, al realizarla fuera del municipio, en su casa de Loma Linda, y con solo parte de los concejales,

El alcalde Rafael Molina enfrenta un creciente cuestionamiento a su gestión, entre otras razones, porque según los datos de la Tesorería Municipal, el Ayuntamiento ha gastado en tan solo diez meses de gestión la suma record para el municipio de RD$141,018,279.36 millones de pesos, sin embargo las obras se encuentran inconclusas y paralizadas, y está bajo cuestionamientos también de los sectores La Colonia, Las Flores, Pueblo Nuevo, Plan Piloto y la comunidad de Zambrana, entre otras, que no han sido tomadas en cuenta en la inversión de recursos en obras.

Las organizaciones comunitaria presentes en la rendición de cuentas de la gestión de Rafael Molina se quejaron porque fueron invitada a una sesión de los concejales, sin embargo se varió el carácter del encuentro y criticaron a Rafael Molina por haber asumido el poder absoluto de decisión relativo a las inversiones con recursos del Ayuntamiento, luego de que se declaran de emergencia las obras determinadas sin consultar a los munícipes.  Dicen los comunitarios que solo en caso algún fenómeno natural o catástrofe se justifica una medida de ese tipo, por lo que han denunciado al referido Síndico por violación de la Ley 170-07 sobre Presupuesto Participativo.

El sábado 18 de junio, en el Salón Comunal de la parroquia Inmaculada Concepción, se celebró una asamblea de organizaciones en la que acordó exigir al ayuntamiento la auditoría social, que se integre una comisión de licitación , la rendición de cuentas de la inversión municipal y que la elaboración del presupuesto sea participativo, mediante el cual las comunidades puedan decir las obras que entienden prioritarias.

Entre las organizaciones en esta asamblea estuvieron Comunidad Cosecha, la Unión de Juntas de Vecinos, la Cámara de Comercio y Producción de la Provincia Sánchez Ramírez, Ceformamali y la Asociación de la Micro Empresa de Cotuí y contó además con la participación de los curas Isidro Bautista y Bienvenido Suriel.