San Cristóbal  -El presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Mariano Germán Mejía, expresó pesar por el fallecimiento de la jueza Altagracia Norma Bautista de CaStillo, quien murió en su residencia en la provincia Peravia, luego de padecen problemas de salud.

Durante un acto, en el palacio de Justicia de esta jurisdicción judicial, en el que le rindieron honore, por su larga trayectoria al servicio judicatura en el país, en especial en la provincia de San Cristóbal, María Garabito, presidenta de la Corte de Apelación de aquí leyó el carta de encomio enviada por German, quien resaltó sus dotes como ser humana y  como servidora pública.

“La magistrada Norma Bautista fue un ser transparente durante su trayectoria en el tren judicial, amiga fiel,  solidaria con la clase, sensible, dedicada, responsable, honrada a carta cabal y con apego incondicional al cumplimiento del deber”, expresó Germán Mejía en la misiva.

En el acto estuvo presente además, Esther Elisa Agelán Casasnova, jueza de la sala penal de la SCJ, quien destacó las cualidades profesionales de Norma, tras señalar que fue una mujer entregada a la actividad judicial, a la formación de jueces y al servicio de la judicatura nacional.

Agelán Casasnova entregó además una réplica de bandera del Poder Judicial al esposo de la fenecida, Rafael Guillermo Castillo, como un reconocimiento a la trayectoria de Norma Bautista, quien estaba jubilada de la judicatura desde 2012.

También asistieron próspero Pérez, Presidente de la Cámara Civil; Rosa Angélica Rodríguez, jueza del Tribunal de Niños, Niñas y Adolescente;   así como jueces de las distintas instancias y salas de esta jurisdicción.

Altagracia Norma Bautista de CaStillo fue designada en 1991 como jueza de la Corte de Apelación de San Cristóbal, en el 1998 fue ascendida a presidenta de la Cámara Penal de la Corte y en 2012 fue pensionada.  Además hizo grandes aportes a la doctrina jurídica,  como docente de la escuela Nacional de la Judicatura.