Por Ramón Mercedes

Los gallos estaban listos para la pelea y fueron incautados por el Escuadrón de Investigación de Crueldad Animal el pasado fin de semana en horas de la noche en la citada área, donde residen decenas de miles de dominicanos.
La práctica de pelea de gallo es ilegal en 48 estados de los Estados Unidos, incluyendo Nueva York, considerándose un delito mayor, porque es una práctica cruel, abusiva y bárbara que tortura a los animales.
Pero en la República Dominicana es una tradición, cultura, costumbre, entretenimiento y juego legal al igual que en incontables países del mundo.
Los arrestados en conexión con peleas de gallos u otros animales, pueden ser sentenciados hasta cuatro años de cárcel y multas de hasta $25,000 dólares, equivalente a más de un millón de pesos dominicanos.
Asistir a un encuentro es un delito menor y conlleva una posible sentencia de hasta un año de cárcel y multas de hasta $1,000 dólares.
“Las peleas de gallos son peligrosas para la comunidad porque conllevan a crímenes con armas, drogas, apuestas y otros delitos, poniendo en riesgo la salud y seguridad del público”, dijeron las autoridades.
Esto debe servir de advertencia para aquellos dominicanos que vengan por primera vez a territorio norteamericano y estén acostumbrados a practicar lo que se considera un deporte en el país caribeño.