Por Ramón Mercedes
MUJERES--Nueva York.- El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo y el alcalde de la ciudad,  Bill de Blasio, han reaccionado en contra de la exhibición pública que están llevando a cabo jóvenes americanas, hispanas, y europeas, en la Plaza de Time Square, frente a frente al consulado dominicano en la urbe (Broadway entre las calles 43 y 44 en Manhattan), quienes solo usan una tanguita, y a muchas de ellas casi se les visualiza su parte intima, y con el resto del cuerpo desnudo y pintado con los colores de la bandera norteamericana.
El gobernador Cuomo ha expresado que las mujeres en esas condiciones están  infringiendo la ley y debilitan los esfuerzos por mantener el ambiente familiar en la zona turística, donde asisten decenas de miles de personas diariamente.
Mientras que el alcalde De Blasio ha manifestado, “es un error” y como progresista que cree en las libertades civiles y nuestra Primera Enmienda, entiendo que hay aquí un desafío legal”, es una práctica “incorrecta” y la ciudad tomará medidas para corregir la situación.
Algunos de los más de 150 dominicanos que van diariamente al consulado, antes de ingresar para  renovar o adquirir algunos de los tantos documentos, cruzan la avenida para observar las jóvenes bien de cerca, las miran fijamente por varios minutos, retorciendo sus labios, haciendo gestos, aparentemente disimulados, al parecer, no poder soportar la tentación de ver una elegante joven en esas condiciones, dejando sentir su crujir “ummm”, o una expresión, cooooooño.
La Primera Enmienda otorga el derecho a usar un traje como una cuestión de libertad de expresión. Los tribunales de Nueva York han dictaminado que las mujeres no pueden ser legalmente impedidas de hacer topless en público, siempre y cuando sea parte de una actuación, exhibición o espectáculo, a pesar de la objeción del Comisionado de la Policía, Bill Bratton.
Las mujeres alegan que actúan de manera legal, ¿no es un tipo de libertad en este país?, indican, así que no creo que vayan a ser capaces de hacer algo en contra de nosotras, pero pueden intentarlo, precisan. Muchas personas alegan que hay que enviarles un mensaje sano a los niños, y esto no lo es.
Las mujeres cobran hasta 20 dólares, equivalente a 900 pesos dominicanos, por tomarse una foto con el interesado. La competencia es cada vez más feroz por parte de los transeúntes, visitantes y forasteros en obsérvala de cerca. Algunas de ellas están acompañadas por hombres musculosos para asegurar que nadie engancha una foto libre o se cuela un selfie.
El respeto es obligatorio, nadie se propasa ni hace gestos provocadores ni insinuadores detonantes, porque las consecuencias serían gravísimas con la Policía y la Justicia.
Los piropos, miradas lascivas, silbidos y diferentes gestos hacia la mujer son frecuentes en República Dominicana y en los países latinoamericanos, porque se consideran parte de la idiosincrasia cultural, pero en Estados Unidos es acoso callejero, y fácilmente llevan al protagonista directamente a la cárcel.
Carmen Salavarrieta, directora de la organización Ángeles en Acción de Plainfield, Nueva Jersey, indicó recientemente que regularmente dicta charlas al respecto, haciendo énfasis en que no deben decirle nada a los transeúntes, “por muy buena intención y respeto con que lo hagan, ni tampoco deben mirar de forma lasciva (gesto que manifiesta una inclinación exagerada al deseo sexual), porque esto acarrea consecuencias negativas, si una mujer le llama la policía”, precisó.