POR LUIS D. SANTAMARIA

El autor es periodista. Reside en Monte Plata.

                  

Luis Danilo Santamaria SantanaEn República Dominicana, el mercado de los servicios económicos se ha transformado en temores, desconfianza e incertidumbre desde 2003. Los usuarios no saben cuál día tendrán una sorpresa acerca de una entidad financiera cualquiera. Estos temores se han traspasado por igual al sector servicios de seguros, donde algunas empresas han patrocinado los últimos escándalos.
La República Dominicana fue sacudida a principios del año 2003 con la
caída del Banco Intercontinental (BANINTER) y las autoridades debieron
salvar los ahorros de los ciudadanos sumaron RD$55,000 millones, igual
a las dos terceras partes del Presupuesto Nacional de ese momento.
Otros defraudadores fueron el Banco Nacional de Crédito (BANCREDITO),
que ha tenido un costo superior a los RD$23,000 millones. Un tercer
caso, el MERCANTIL, fue revelado meses después. Aunque la suma
envuelta es menor, el caso no es menos escandaloso e indignante. Ha
costado hasta el momento más de RD$6,500 millones.
Con la caída de bancos insignias de la economía como BANINTER y
BANCRÉDITO, y el más reciente, el Banco Peravia, los rumores y temores
corren en el mercado como sus propios valores y depósitos. La razón es
que leyes y supervisión son debilidades estructurales en la República
Dominicana, pendientes de solucionar.
Las autoridades del Banco Central y la Superintendencia de Bancos
procedieron a someter a la Justicia estos tres casos.
Pero las crónicas registran otros tantos casos de intento de timo,
como el de las financieras Corporación de Crédito (COCRETUR) y
Préstamos Personales de Nómina S.A. (PRIMESA), acusadas de estafar a
varias familias con sus ahorros.
Diferentes fuentes registran los hechos más notables y dañinos a la
clientela, y a la propia economía.
SECTOR SEGUROS- EMBARGOS PREVENTIVOS
Desde hace años atrás, capitales peregrinos o inversiones
oportunistas, explotadores de “burbujas”, y fondos dudosos,
regularmente vinculados al ilícito, han fijado su mirada en la
República Dominicana como destino de inversión y oportunidad de
negocios.
Aprovechan las vulnerabilidades y las escasas herramientas
tecnológicas para el monitoreo frecuente.
Los usuarios han sido en los últimos años sometidos a todo tipo de
estafas, bancarias, por financieras, tarjetas de crédito, quiebras de
empresas, etc.
Este comportamiento entre algunos agentes de la economía que terminan
victimizando a sus clientes, ha generado una crisis de confianza, pero
ha dejado en evidencia, los pocos controles y la carencia de un
monitoreo efectivo por parte de las superintendencias.
El economista Darys Javier Cuevas ha advertido que el esquema de
estafa piramidal ha causado múltiples escándalos de

estafa piramidal ha lo que ha causado múltiples escándalo en el mundo, dejando pérdidas millonarias y problemas políticos.
En Latinoamérica han sido víctimas países como , Guatemala en 1994,
chile en el 2007, Venezuela en el 2002, Ecuador en el 2005 y Colombia
con un escándalo en el 2008 que estremeció el sistema financiero. En
la República Dominicana, desde 1998, con momentum que estafó con
RD$117 millones a 16 mil personas, múltiples entidades fantasma se han
instalado y en febrero del 2011 la superintendencia de bancos denunció
que Global Gifting Conection(GGC) tenía intenciones de operar, pero
la persecución ha sido tímida ya que no existe una penalización de
estas operaciones.
Pero el contagio, ha alcanzado también al sector Seguros, que tiene
ventas de pólizas valorados en 32 mil millones de pesos al 2015. Los
usuarios-clientes han confrontado dificultades con las compañías
Segna, Unión de Seguros, y bajo sospecha, Seguros Sura.