Libia es el primer gran exportador de petróleo que es afectado por la ola de revueltas en el Medio Oriente y por eso la crisis aquí podría tener una mayor repercusión en el mercado petrolero y en la economía mundial que las manifestaciones en Egipto o en Túnez.
Las protestas en Libia han contribuido a elevar los precios del petróleo a sus niveles más altos desde la crisis financiera mundial en 2008.
El crudo Brent, uno de los principales puntos de referencia en los mercados internacionales, llegó a alcanzar este lunes los US$105 el barril.
Algunos analistas advierten que el crudo podría dispararse otros diez dólares a corto plazo si la violencia continúa.
“Cuando la crisis en Egipto había preocupación por temor de que hubiera dificultades en el transporte de petróleo por el Canal de Suez, pero Libia es el primer gran exportador que experimenta directamente la ola de protestas, así que las repercusiones podrían ser potencialmente mayores”, señala Andrew Walker, experto de negocios de la BBC.
Importancia estratégica
Cuando la crisis en Egipto había preocupación por temor de que hubiera dificultades en el transporte de petróleo por el Canal de Suez, pero Libia es el primer gran exportador que experimenta directamente la ola de protestas, así que las repercusiones podrían ser potencialmente mayores.
Andrew Walker, analista de la BBC.
Libia es uno de los principales productores de petróleo de África, con una producción diaria de 1,65 millones de barriles o alrededor de un 2% de la producción mundial.
Los líderes europeos ven con particular preocupación los eventos en Libia. Las acciones cayeron un 0,7% en Alemania, 0,7% en Paris y 0,2% en Londres, en respuesta a la crisis en el país norafricano.
La producción libia representa también un 10% del consumo de petróleo de Europa y un cuarto del de Italia, aunque la nación también exporta a Estados Unidos y China.
“Europa sería la región más afectada de forma inmediata por una interrupción sostenida de la industria petrolera allí, pero otras partes del mundo también sufrirían los efectos debido a que los europeos buscarían fuentes alternativas”, dijo Walker.
El país norafricano es también un gran exportador de gas, principalmente a Europa, por medio de gasoductos que cruzan via Italia.
Sus reservas de gas se estiman en 1,49 billones de metros cúbicos.
Hasta el momento, el aumento de los precios se debe al nerviosismo de los mercados, pero Walker destaca que “una interrupción real de la producción llevaría a un aumento mucho más marcado”.
Intereses petroleros en juego
Libia tiene un gran potencial petrolero y gasífero que ha sido poco explotado, en parte porque el país permaneció cerrado a la inversión extranjera por muchos años.
Pero el gobierno libio ha llegado a una serie de acuerdos con Occidente que han permitido el retorno de esas compañías.
La crisis podría afectar esas nuevas inversiones.
“Cualquier interrupción de las operaciones o preocupación por la seguridad del personal de esas empresas podría tener serias repercusiones”, señaló el corresponsal de la BBC, John McManus.
La británica BP anunció este lunes que había suspendido sus preparativos para iniciar la exploración petrolera, y anunció la salida de todo personal no esencial y sus familiares.
La noruega Statoil cerró su sede en Trípoli y ya inició el traslado de sus trabajadores.
Shell dijo que ha reubicado temporalmente los familiares de su personal, en tanto que Repsol dijo que sus operaciones continúan con normalidad.
“Las empresas petroleras extranjeras están observando con ansiedad los eventos en Libia y esperan que cualquier revuelta sea temporal”, destacó McManus.