SANTO DOMINGO, RD.-El campeonato número 65 del béisbol profesional dominicana que se inicia este miércoles se apresta a confirmar el equilibrio que ha reinado en los últimos años en la liga.
Con las peculiaridades que hacen única a la Liga Dominicana (Lidom) como refuerzos por un mes, nativos “parados” por sus organizaciones, protagonistas inesperados y la amenaza en los últimos años de las ligas asiáticas -ladronas de talento-, ya no se percibe la ventaja de los equipos de mercados grandes en detrimento de los denominados de mercados pequeños.
Y es que ya no basta con contar con recursos económicos cuantiosos. Lo que se impone en estos momentos es tener el mejor recurso humano disponible, libre de ataduras para ver acción y formar una “química” entre los talentos de la diversa índole que se dan cita en la justa.
Una gran parte de la “culpa” de la igualdad que ha democratizado las oportunidades de alcanzar un campeonato se le achaca a la implementación, a partir del 2002, del sorteo de novatos que da a los equipos el chance de repartirse a los mejores jugadores de nuevo ingreso.
En los 14 torneos disputados entre 1995-96 y 2008-09, solamente las Águilas Cibaeñas (9) y los Tigres del Licey (5) fueron capaces de levantar la corona de campeón tras el último out de la serie final.
A partir del 2009-2010, cuando los Leones del Escogido rompieron una racha de 18 años sin “ver a linda”, el equipo rojo ha logrado tres coronas con una para los Toros del Este, Tigres del Licey y Gigantes del Cibao.
Los dos restantes equipo, Águilas -último título en 2008- y Estrellas Orientales -última corona en 1968-, han estado en un par de oportunidades cada uno en la serie final.
Para la ocasión, las gerencias han apostado por un empate entre los nativos y los extranjeros a la hora de decidir en manos que cuales managers colocarían sus escuadras.
Los campeones Gigantes del Cibao repiten con el exitoso Audo Vicente, los Toros del Este confían en el máximo ganador de coronas, Félix Fermín, mientras que los Leones del Escogido depositan su confianza en Luis Rojas.
Los “refuerzos” como dirigentes son Andy Barkett, quien repite con las Águilas, y los debutantes Lino Rivera con el Licey y Pat Listach con las Estrellas.
Cuatro de estos regresan a sus funciones como tales: Moisés Alou (Escogido), Pablo Peguero (Toros), Manny Acta (Licey) y José Serra (Estrellas). Félix Francisco asume con los Gigantes, mientras que el presidente Quilvio Hernández lidera al “buró colegiado” que toma las decisiones para las Águilas junto a Gaby Hernández, Ángel Ovalles y Miguel -Guelo- Diloné.
