SANTO DOMINGO,RD.-Ejecutivos de Falconbridge Dominicana (Falcondo) presentaron a los miembros de la Comisión de Medioambiente de la Cámara de Diputados detalles sobre su proyecto de extracción de ferroníquel en Loma Miranda, La Vega.

 

La empresa estuvo representada por los señores Antonio García, Gerente General, Giovanni Bloise, director de Minas y Nuevas Reservas y Luis José López, gerente de Asuntos Externos, así como por Dominique Dionne, VP Asuntos Corporativos de la casa matriz Xstrata Nickel.

 

En su presentación sobre el proyecto, el Gerente General de Falcondo, Antonio García, aseguró que “como demuestra el Estudio de Impacto Socio Ambiental, la cantidad y calidad del agua del río Jagüey, del balneario Acapulco, y los acueductos de la región no se verán afectados”.

 

El ejecutivo explicó que dentro de la propiedad de 1,373 hectáreas que tiene la empresa en Loma Miranda se mantendrá cerca del 65% (más de 889 hectáreas) como área protegida, para preservar las fuentes de agua y la biodiversidad de la zona.

 

El río Jagüey está dentro del área protegida y además tendrá una salvaguarda especial. A junio de 2012 se han plantado 132,651 árboles de especies nativas en la cuenca alta del río. “Nuestro compromiso es continuar plantando 60,000 árboles cada año y darle mantenimiento permanente a las áreas reforestadas. A todos nos importa Loma Miranda y tenemos el compromiso de proteger su biodiversidad y fuentes de agua”, destacó García.

Aclaró que la empresa va a preservar el Jagüey como si fuera el río más importante del país, tal como demuestran otros proyectos conducidos por Falcondo y nuestra Fundación Falcondo.

 

Por su parte el geólogo Giovanni Bloise expuso que para garantizar la integridad de las fuentes de agua, se aplicará un efectivo sistema de manejo de aguas superficiales, que favorecerá una infiltración adecuada, asegurando que los ríos y arroyos de la zona mantengan su caudal y minimizará la erosión y la sedimentación, de manera que las presas y los acueductos tampoco sean afectados.

 

El ejecutivo de Falcondo puntualizó que “en la extracción del ferroníquel no se usan ningún tipo de químicos ni explosivos”. El proceso consiste en extraer tierra mineralizada mediante el uso de equipos mecánicos; esta se transporta hasta la planta ubicada en Loma Peguera donde se obtiene el ferroníquel mediante un proceso pirometalúrgico, es decir a base de altas temperaturas.

 

Bloise informó que el área total destinada a la extracción de ferroníquel en Loma Miranda equivale aproximadamente al 0.1% del área total de la provincia de La Vega, y bajo la construcción de infraestructura y los estrictos estándares de operación se administrará responsablemente la calidad del aire y del agua del área de operaciones, tal como lo establecen los estudios medioambientales.

 

Por otra parte los representantes de Falcondo explicaron que a lo largo de toda su ejecución el proyecto Loma Miranda será permanentemente supervisado por las autoridades medioambientales, con la colaboración de comunitarios y de organizaciones internacionales especializadas, además de por sus propios técnicos, quienes asegurarán el cumplimiento estricto de los planes de manejo y de mitigación previstos para cada riesgo, como estará establecido en la licencia ambiental que rija el proyecto.

 

Los planes de manejo del proyecto responden a los resultados de un exhaustivo Estudio de Impacto Socio Ambiental (EISA) que estableció mediciones de línea base para los diversos indicadores: aire, ruido, variables meteorológicas, aguas (superficiales y subterráneas), flora, fauna, factores geológicos, hidrológicos y socioeconómicos.

 

Los ejecutivos de la empresa minera enfatizaron que al concluir el proyecto toda el área de operaciones quedará rehabilitada y reforestada como lo garantiza el plan Progresivo de Extracción en franjas de terreno de 15 a 30 hectáreas por año, que limitará el impacto visual y físico de las áreas descubiertas; y la reforestación de las áreas reclamadas o rehabilitadas se hará paralela a la extracción. A medida que estas se vayan reforestando se irán sumando al área protegida.

 

“Anteriormente utilizábamos un proceso de extracción de mineral que obligaba a tener múltiples y extensas áreas abiertas a la vez. Ahora, por cambios en nuestros procesos, es posible realizar una rehabilitación progresiva como la que haremos en Loma Miranda” explicó el director de Minas.

 

Aun así, Falcondo ha logrado alcanzar una relación de 47% de áreas reforestadas, sobre las áreas históricamente intervenidas, proyectándose lograr un 50% de las áreas de operación reforestadas para diciembre 2012.

 

Los ejecutivos afirmaron que un proyecto minero ambientalmente bien manejado, con un plan de cierre adecuado, que incluya seguimiento y monitoreo después del cierre, no debe dejar pasivos ambientales. Este es el caso del proyecto Loma Miranda.