VILLA ALTAGRACIA, RD.- Seria interesante conocer hoy el parecer de los feligreses católicos de este pueblo que el 21 de enero del 2011, compartieron en el desfile con el entonces nuncio apostólico de su santidad, Monseñor Józef Wesolowski, quien
encabezó la procesión como motivo del Día de La Altagracia en este municipio.
En esa ocasión el nuncio acompañó los cientos de feligreses que se sumaron entusiastamente a la caminata que duró más de una hora y recorrió diversos sectores del pueblo.
Partió de la iglesia tras finalizar una misa oficiada por el nuncio Wesolowski en compañía del párroco Guillermo Sierra y varios sacerdotes y diacono más.
Allí ni el padre Guillerno, ni los demás feligreses sabían de las acciones que cometía el el representante del Papa, quien en la actualidad es procesado por abuso de menores.
Y los regidores del ayuntamiento de aquí deberían derogar la resolución que le entregaron ese dia al Nuncio en la que lo declaran huésped distinguido al nuncio.
Además los directivos de al iglesia católica deberían pedirle excusas a este pueblo que invitar este tipo de personas a esta localidad para rendirle honores a un degenerado.
