Por Marino Ramírez Grullón

OBAMAHaber logrado establecer un sistema de seguridad social, denominado el (ObamaCare), frenar aunque no dar por terminadas las guerras de Afganistán e Irak, establecer relaciones diplomáticas con Cuba pero lo más importante darle crecimiento económico y laboral a la decaída producción industrial de los Estados Unidos durante los últimos 7 años, son el legado que Barack Obama dejará a su nación antes de irse del poder.
Hay que reconocer que en principios se esperó más de este Presidente de color negro quien con un discurso más a la izquierda que Hillary Clinton logró derrotarla en las primarias del Partido Demócrata para luego imponerse en dos ocasiones en las presidenciales de su país.
De todos estos hitos que dejará Obama el más sobresaliente es que fue el primer Presidente de color negro que llegó a la Casa Blanca, cosa impensable en algún momento de la historia de esa Nación.
Parece además que podría entregar el solio presidencial a una sucesora que sería su compañera de partido, Hillary Clinton.
Ya con la llegada al poder de Abraham Lincoln, el Presidente de la emancipación y de John Kennedy el Presidente católico, Obama es y será historia política permanente en los Estados Unidos de América.
Sus predecesores George Bush y George W Bush dejaron una historia negra de lo que será por mucho tiempo el análisis del comportamiento presidencial de Norteamérica.
Ambos jefes de Estado, padre e hijo más bien gobernaron para defender los intereses de los conglomerados económicos que representaban aunque no hay que dejar de mencionar las situaciones contagiosas que en el ámbito de la política internacional se vieron envueltos.
La cuestión de la guerra preventiva inaugurada por Bush hijo a partir de los atentados del 11 de Septiembre del 2001 puso un contrapeso e inauguró el espíritu de guerra que envolvía a partir de ese momento a los Estados Unidos.
A partir de ese momento la gran nación del norte encabezada por un representante del complejo militar industrial y del petróleo, advirtió de que una guerra podía producirse en cualquier parte del mundo y encabezada por su ejército.
Afganistán, Irak, golpes de mano en otros países bajo el supuesto de la lucha contra el terrorismo se dieron cita por todo el mundo.
Con la llegada de Barack Obama al poder los Estados Unidos dejaron abierta otra era, las guerras comenzaron a finiquitar, se inicia un periodo de crecimiento económico y más que eso negociaciones con enemigos que eran impensables.
De ahí que Obama en sus casi 8 años de gobierno deja un legado de crecimiento económico y de paz que aunque no sea permanente será uno de los motivos de recordación de su era.