SANTO DOMINGO.- El centro educativo Max Henríquez Ureña fue fundado el 4 de octubre del año 1971, en la calle Santa Luisa de Marillac, en el sector de Katanga, Los Mina, municipio Santo Domingo Este, y desde la fecha ha contribuido con el desarrollo educativo y la formación de muchos jóvenes de esa localidad.
Alfonso Reyes criticó que a pesar de que el centro educativo desde el año 2012 dejó de funcionar como colegio privado para convertirse en público y funcionar bajo la responsabilidad del Ministerio de Educación, el mismo no ha sido beneficiado de la “Revolución educativa” que, según dice, tanto pregona el ministro de Educación, Carlos Amarante Baret.
“Tenemos dos años trabajando sin presupuesto, sin mobiliario, sin materiales gastables y los estudiantes no están recibiendo el desayuno escolar, uniformes, libros y los beneficios que necesita el centro educativo para funcionar adecuadamente”, denunció Reyes.
Explicó “tratamos de contactar a la directora, pero fue imposible, pero conversamos con algunos maestros los cuales testificaron que el Centro Educativo Max Henríquez Ureña, tiene dos años operando sin presupuesto y sin los beneficios que el Ministerio de Educación entrega a las escuelas, por lo que tenemos que recurrir a los padres de los estudiantes para que aporten recursos para mantener el centro higienizado”.
Señaló que la directora ha depositado todos los documentos que les fueron requeridos en el ministerio, para transferir ese centro educativo de privado a público y ha sido imposible, por lo que llevan dos años trabajando con muchas precariedades, además de que necesitan el nombramiento de tres maestros, dos porteros y un sereno.
“Entendemos que el presidente Danilo Medina está transformando el sistema educativo dominicano, no obstante sin presupuesto, sin mobiliarios y sin profesores nunca vamos a tener buenos estudiantes y buenos maestros”, enfatizó Reyes.
Declaró que tienen todo este tiempo luchando por la asignación del presupuesto y en Educación se lo han negado y además los documentos están todos engavetados.
