Por: Nélsido Herasme
Mucho cuidado con la Junta Central Electoral. La oposición está consciente de que acta mata voto, pero el centro de cómputo lo mata a los dos.
Nosotros conocemos perfectamente desde hace más de treinta años al presidente de la Junta Central Electoral, Dr. Roberto Rosario (Robertico), por lo tanto tenemos los suficientes elementos de juicio para exhortar al Partido Revolucionario Dominicano y a la oposición a no ceder un ápice en su postura ante el mantenimiento de Franklin Frías al frente del centro de informáticas del alto tribunal electoral.
Somos muchos los que conocemos a Robertico Rosario y sabemos de lo que es capaz.
Si el PRD se deja doblar el brazo del presidente de la JCE, estaría asistiendo como manso corderitos a un matadero electoral, teniendo que cargar con las consecuencias, al tiempo de ponerse de mojiganga ante el electorado nacional.
Robertico no es un advenedizo ni un imberbe; es un político a tiempo completo, miembro del comité central del Partido de la Liberación Dominicana desde el año 1984.
Arriesgarse a participar con Franklin Frías, al frente del centro de cómputo, es como tomarse un veneno, o amarrarse un yunque en el cuello y lanzarse al mar, porque ya sus titulares presentaron credenciales de lo que son capaces de hacer en el proceso electoral del 2010.
Robertico es un político de los pies a la cabeza, un ex izquierdista, fogueado en las lides estudiantiles, brazo nacional de la Juventud del Partido Bandera Proletaria, dirigido por el extinto profesor universitario Dr. Juan B. Mejía.
En los finales de los años 70 y en los albores de los 80, Robertico Rosario fue nuestro orientador político, quien nos reclutó para el Comité Pro-Nuevo Movimiento Estudiantil (COPRONUME) en el liceo Juan Pablo Duarte, organización que más tarde se fusionó con la Unión Nacional de Estudiantes Revolucionarios (UNER).
Recordamos que para esa época fueron celebradas las elecciones estudiantiles para escoger al presidente de la incipiente Federación Nacional de Estudiantes Secundarios (FENES). Nosotros como candidato perdimos por más de 60 votos del Frente Estudiantil Flavio Suero (FEFLAS) la presidencia de la Asociación de Estudiantes del Liceo Juan Pablo Duarte, pero fuimos impuestos, gracias a las “mágicas maniobras” de Robertico Rosario.
Sabiendo que habíamos sido derrotados, intentamos felicitar al triunfador, pero fuimos impedidos por Robertico, al tiempo que nos comunicaba que el ganador había sido quien calza este escrito.
A partir de esta vivencia es que alertamos a la oposición a tener sumo cuidado con los titulares de la JCE, pero en especial con el Dr. Roberto Rosario. Esa es una Junta sumisa, genuflexa y fiel obediente a los intereses del partido de gobierno, por lo tanto no es garantes de un proceso equilibrado.
