para ratificar el fuerte compromiso con el  mejoramiento de la protección de las personas refugiadas, desplazadas  y migrantes

El Departamento de Justicia y Solidaridad (DEJUSOL) del Consejo  Episcopal Latinoamericano (CELAM) reunió, esta semana, a gran parte de  organizaciones de movilidad humana, refugio y trata de personas de la  Iglesia Católica de América Latina y el Caribe para, en clave de  unidad, conformar la Red Latinoamericana y Caribeña de Migración,  Refugio y Trata de Personas (Red CLAMOR), en Santiago de los Caballeros.

La Red Latinoamericana y Caribeña Clamor, en clara referencia al texto  bíblico del libro del Éxodo (3, 7-8), tiene como objetivo articular el  trabajo pastoral que realizan diversas organizaciones de la Iglesia  Católica en América Latina y el Caribe para, desde la misión  evangelizadora de una iglesia en salida, acoger, proteger, promover e  integrar los migrantes, refugiados, desplazados y víctimas de tráfico  y trata de personas.

En este sentido, Monseñor Gustavo Rodríguez, Arzobispo de Yucatán y  Presidente del DEJUSOL, manifestó estar “muy feliz porque el programa  de crear la Red CLAMOR era uno de los compromisos para este cuatrienio  del DEJUSOL. Ha sido un momento de mucha esperanza y ahora que ha  llegado su nacimiento con este encuentro, veo la realización de este  sueño, de esta ilusión. Veo el entusiasmo de los participantes que  representan a diversos grupos de Iglesia entre misioneros, religiosos,  clérigos y laicos que ahora unidos vamos a hacer un mejor trabajo en  favor de los migrantes, de los refugiados y de las víctimas de trata.  De este modo veo con mucha esperanza y futuro esta pastoral”.

Con este encuentro se consolida lo que en su momento fue una propuesta  e inicia un camino en la unidad católica. Por ello, Monseñor Julio  César Corniel, Obispo de Puerto Plata, considera que la Red CLAMOR  “será una herramienta de apoyo que nos ayude a trazar líneas concretas  para el trabajo con los migrantes, unificar criterios, sentirnos  apoyados y juntos buscar soluciones a problemas que nos afectan. Sin  duda es una gran esperanza”.

El principal reto de CLAMOR estará en ser una Iglesia Samaritana que,  movida por la misericordia de Dios Padre manifestada en Jesucristo,  sale al encuentro de nuestros hermanos más vulnerables allá donde se  encuentren. Los integrantes de la Red Clamor quieren ser un “hospital  de campaña” donde los hermanos migrantes, desplazados, refugiados y  víctimas de trata encuentren, en palabras del Papa Francisco, acogida  y bienvenida, protección y curación de sus heridas, reconocimiento de  su dignidad y promoción, e integración e inserción en las comunidades  y países a los que llegan.

Cabe señalar que entre las organizaciones participantes estuvieron:  Centros Sociales de la Compañía de Jesús en República Dominicana, Red  Scalabriniana Internacional de Migración, Servicio Jesuita a  Refugiados de América Latina y el Caribe (SJR), Secretariado  Latinoamericano y del Caribe de Cáritas (Selacc), Secretaría General  del Consejo Latinoamericano de Religiosos y Religiosas (CLAR), Red de  Solidaridad para Migrantes y Refugiados de Brasil, Departamento de  Movilidad Humana de la Conferencia Episcopal de República Dominicana,  Departamento de Movilidad Humana de la Conferencia Episcopal Mexicana,  Departamento de Movilidad Humana de la Conferencia Episcopal de  Guatemala, Departamento de Movilidad Humana de la Conferencia  Episcopal Haitiana, Consejería General de Apostolado de las Hermanas  Scalabrinianas,  Hermanos Franciscanos, Instituto Chileno de  Migraciones, Fundación un Grito por la Vida, Red “Hacia la Libertad”  de la Congregación El Buen Pastor, Congregación de las Religiosas  Adoratrices, Congregación de las hermanas de San Juan Evangelista y la  Dirección del Proyecto Muchachos y Muchachas con Don Bosco.