EFE
Colombia,-El Gobierno de Colombia enviará la próxima semana una misión consular a Haití para dar asistencia a los exmilitares detenidos en ese país por su presunta participación en el asesinato del presidente Jovenel Moise y apoyar la repatriación de los tres miembros del grupo que fueron muertos.

La vicepresidenta y canciller de Colombia, Marta Lucía Ramírez, dijo este viernes a corresponsales extranjeros que el viceministro de Relaciones Exteriores, Francisco Echeverri, está en contacto permanente con los familiares de los colombianos y con el embajador de Haití en Bogotá, Jean Mary Exil, quien viajó a Puerto Príncipe para facilitar los trámites.

Según Ramírez, el Gobierno colombiano va “a procurar que pueda haber una misión consular que asista a Haití una vez que las autoridades haitianas nos den su visto bueno para poder apoyar a las familias en la repatriación de los cadáveres de quienes fallecieron”.

En un principio la misión consular debía viajar el próximo miércoles, pero en vista de que los funerales del presidente Moise, asesinado el pasado 7 de julio en un ataque armado a su residencia, se extenderán por tres días, es probable que el viaje se tenga que mover para finales de semana.

CONDENA DEL MAGNICIDIO

Según la Policía haitiana, 18 militares retirados colombianos han sido capturados por el magnicidio y otros tres fueron abatidos.

“El magnicidio de cualquier persona es totalmente inaceptable. El magnicidio de un presidente pone en peligro no solamente la institucionalidad y la estabilidad democrática sino la estabilidad de una nación”, dijo hoy la vicepresidenta y canciller al condenar el asesinato.

Ramírez subrayó el dolor del Gobierno colombiano “por el magnicidio del presidente de Haití y especialmente saber que pudo haber colombianos partícipes” de ese crimen, lo que consideró “totalmente inaceptable”.

“En mi caso conozco muy bien el alma de los soldados de Colombia, sé que nuestros soldados son gente que se forma y trabaja para proteger la vida de los ciudadanos, jamás un militar colombiano, dentro de lo que es su formación, pensaría siquiera en la hipótesis de participar en un magnicidio”, dijo al recordar que también fue ministra de Defensa entre 2002 y 2003.

La vicepresidenta agregó que, “lamentablemente, como lo ha dicho el presidente Iván Duque, aparentemente alguno de los colombianos que fueron a Haití sabían de qué se trataba” el plan para el cual fueron contratados, pero “la mayoría fue a otra misión, supuestamente a apoyar las fuerzas de seguridad de Haití; fueron engañados”.

COOPERACIÓN CON HAITÍ

Al día siguiente del asesinato el Gobierno colombiano envió un equipo de investigadores a Haití para ayudar a las autoridades de ese país a esclarecer el crimen cuyos motivos y autores todavía son un misterio.

“Toda la labor del Gobierno colombiano y del Estado colombiano está orientada a darle apoyo a las autoridades haitianas para que se esclarezca este crimen, para que se identifique a todos los partícipes materiales e intelectuales, estén en Haití o estén en el exterior”. añadió.

Tras señalar que los implicados deben responder “ante la justicia haitiana porque un magnicidio de un jefe de Estado es un crimen que no pude pasar desapercibido la comunidad internacional”, la vicepresidenta subrayó la necesidad de que el mundo siga apoyando a ese país caribeño inmerso en una crisis permanente.

“Haití es un país que ha sufrido muchísimo y es un país que requiere el apoyo de la comunidad internacional para seguir en el proceso de fortalecer sus instituciones, fortalecer su democracia, fortalecer su economía y garantizar una estabilidad para la población”, manifestó.