Por Juan Cruz Triffolio
Qué decirte, Cacique..?
Adiós, es imposible…
Siempre permanecerá entre nosotros.
Tus aportes hacen imposible el olvido…
Porque fuiste y seguirá siendo el arquetipo del indomable luchador por la Democracia.
Un sempiterno combatiente en las contiendas por el respeto a los Derechos Humanos.
Una resistente columna inflexible contra la reelección presidencial.
Peñagomista leal y rectilíneo…!!
Amigo de los amigos…
Fino polemista de verbo incisivo y florido ante los despiadados adversarios.
Hatuey…
Tu servicio a la patria amada
permanecerá como valioso paradigma a emular.
Tu hasta luego,
humanamente doloroso,
es una ineludible invitación
para que el bramar de tu toro negro
nunca honre el silencio…
Las clarinadas de tus determinaciones.
El tronar de tus posiciones
y la firmeza que exhibiste,
invita a superar la tristeza,
empapándonos de la alegría,
hija del deber cumplido,
para decirte a viva voz:
Hatuey…
Titán de mil batallas,
los gladiadores espartanos no mueren,
descansan en Paz..!!
