Castro favorece la revisión del voto preferencial y la celebración de Primarias cerradas y simultaneas.
Santo Domingo: El reputado académico, titular de las escuelas de Derecho y de Política de la Universidad Autónoma de Santo Domingo(UASD) dijo que con las primarias cerradas y simultaneas se acabaría con la repartición de candidatura, porque los candidatos serían electos en función del resultado de la primaria
El vice decano y aspirante a decano, entiende que a la convención iría el 80% de las candidaturas y el otro 20% para reserva de la cúpula de los partidos, de esta manera se le da la oportunidad a personas que tienen la calidad, pero que no pueden presentarse en una convención interna. Expresó que la democracia es participación, pero también hay que relacionarla con la representación estratégica y de calidad, y cada vez el congreso necesita de gente mejor formada.
El maestro estableció que de ese 20% reservado, nunca puede estar el presidente, el vicepresidente, ni el número uno, ni el número dos, afirmó que la candidatura del presidente, el vicepresidente y los senadores tienen que ser elección popular y directa de las bases de los partidos, pero se puede aplicar para los diputados y para negociar con los aliados.
Puso como ejemplo la crisis que tiene el Partido Socialista Obrero Español (PASOE) donde una cúpula se reveló contra el comité federal que dirige Pedro Sánchez y que quieren violentar la decisión de Sánchez que fue electo por la primaria general del partido y eso afecta el partido, porque un candidato que ha sido electos por las masas de sus partidos es un candidato portentoso que solo tiene que conquistar a lo externo.
En cuanto al voto preferencial, el laureado politólogo y abogado piensa que producto de este se han creados situaciones muy delicadas, se ha visto un canibalismo, una lucha sin cuartel alrededor de las nominaciones de las candidaturas de los partidos políticos y esto de alguna manera deshumaniza un poco la política. Apuntó que el voto preferencial debe ser revisado, desde el punto que los partidos políticos se respete el orden de la votación y que no tenga que ver con decisiones de cuotas partidarias.