A una semana de la elección presidencial la competencia cada día más encarnizada entre las dos opciones mayoritarias y la percepción de que el resultado de las urnas será muy cerrado genera tensiones y hasta temores de que se ponga en peligro la institucionalidad democrática y la gobernabilidad del país.
La irrupción en la campaña del presidente Leonel Fernández, con amplio despliegue del poder del Estado y los informes sobre el desbordamiento del gasto gubernamental y una propaganda aplastante de la candidatura oficialista configuran una de las competencias más inequitativas de la aún incipiente democracia nacional.
Cansancio y tensiones
En diversos estamentos sociales se percibe cansancio, que se refleja hasta en los mismos partidos políticos, por una campaña electoral tan intensa y extensa que se aproxima al año si se mide a partir de la elección de los candidatos presidenciales de los dos partidos mayoritarios. Hipólito Mejía, del Revolucionario Dominicano (PRD) fue electo el 6 de marzo y Danilo Medina, del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) el 28 de junio del 2011.
Los temores, incluso por la posibilidad de una segunda vuelta, aumentan porque las encuestas proyectan una votación bastante cerrada y con potencial conflictivo en contraste con las tres anteriores elecciones presidenciales, cuando siempre se configuraba un claro ganador. Mejía duplicó a Medina en el 2000 (49.85 a 24.94 por ciento), Leonel Fernández ganó a Mejía en el 2004, por 23 puntos (57 a 34 por ciento), y también a Miguel Vargas en el 2008 con diferencia de 13 puntos (54 a 41)
Entre las peculiaridades de esta campaña resalta la presencia de 15 firmas encuestadoras que dividen sus resultados entre los dos principales competidores, pero en general con diferencias por debajo del 6 por ciento y varias dentro del margen de error. En la generalidad de los países de la región se publican entre tres y cinco encuestas. A favor de Medina se inscribe el hecho de que ha sido favorecido en las dos más acreditadas del mercado, la Gallup-HOY y la Penn/Schoen que en abril le han arrojado ventajas de 6 y 5 puntos. Otras seis encuestadoras contratadas le han favorecido: Asisa, Newlink, Hamilton Campaigns, Insight, Alfonso Cabrera y Bernenson.
Al candidato del PRD le han favorecido los resultados de dos consideradas independientes, la Greenberg-Diario Libre, con sólo 3 puntos de ventaja, y la CID-Gallup apenas por 1.4 por ciento. Cosecha mayores frutos en las contratadas Bendixen/Amandi, ABC Marketing, Analytics, Centro Económico del Cibao y Ana María Acevedo.
El presidente en campaña
Más allá de la violencia que ha cobrado dos vidas en la provincia Espaillat, de las campañas sucias y del discurso descalificador y ofensivo, lo que ha caracterizado el proceso electoral es la ausencia de un arbitraje regulador e independiente y la irrupción del presidente de la nación que disputa el protagonismo hasta al candidato de su partido.
El doctor Fernández ha estado recorriendo el país en caravana, seguido por altos funcionarios nacionales y locales, en helicópteros y vehículos, con choferes, combustibles y dietas del gobierno. Sus visitas son precedidas y seguidas de repartos de alimentos y electrodomésticos mientras inaugura y anuncia nuevas obras, algunas tan costosas como la carretera norte-sur. El miércoles pasado Comedores Económicos del Estado repartió 6 mil raciones de alimentos y 60 mil pollos en la provincia Dajabón, con menos de 50 mil electores, como lo dispuso el mandatario en visita días antes. Allí dejaron de manera fija una cocina móvil para distribuir alimentos cocidos. Y una nota del organismo dijo que lo mismo está haciendo en otras 24 provincias.
Basados en informaciones oficiales, los economistas Fernando Alvarez Bogaert, Apolinar Veloz y Miguel Ceara Hatton han cuantificado entre 45 y 48 mil millones de pesos el déficit fiscal acumulado en los primeros 4 meses del año por el desbordamiento del gasto del gobierno. Al 20 de mayo podría acercarse a los 60 mil millones de pesos, suma muy superior a los 40 mil millones que el mandatario anunció en Nueva York, en septiembre, que gastaría para asegurar el triunfo de su partido. La incertidumbre creció esta semana en los ámbitos empresariales con la divulgación de un informe del FMI que ya en diciembre declaraba la insostenibilidad del déficit fiscal por lo que plantea un paquete tributario para buscar al menos 80 mil millones de pesos adicionales.
En ámbitos diplomáticos impactó la declaración presidencial de que el primer boletín de la Junta Central Electoral indicará la victoria del PLD. El viernes proclamó que su prioridad es ganar en todas las provincias. Causó impresión el despliegue de la galería de fotos de los jefes militares proclamándose garantes de las elecciones, como en los años de los fraudes balagueristas. Otro factor de incertidumbre es el manifiesto empeño de las autoridades electorales en obstruir la observación electoral y el conteo rápido del movimiento cívico Participación Ciudadana.
Al aumento de las preocupaciones se atribuyó la visita al presidente Fernández de una docena de los más importantes embajadores acreditados en el país, incluyendo al de Estados Unidos y la de la Unión Europea. Quisieron mantener un discurso diplomático pero declararon que esperan elecciones transparentes. Esa visita no ocurre en ningún país donde haya confianza en el respeto al procedimiento democrático. El embajador de Venezuela declaró que no asistió al encuentro porque no es su línea la injerencia en asuntos internos de los dominicanos, confirmando la preocupación.
Propaganda apabullante
La maquinaria propagandística con que cuenta la candidatura del PLD es apabullante, acaparando más de dos tercios de toda la publicidad política en los medios de comunicación y las vías públicas, como ya documentó Participación Ciudadana en su cuarto informe de observación electoral. Pero además controla editorialmente varios canales de televisión y decenas de radioemisoras en manos del Estado, que se manejan como aparatos propagandísticos propios, y una red de más de dos mil comunicadores pagados en todo el país que influyen sobre periódicos, noticiarios y programas de opinión en radio y televisión.
Incentivando a unos y poniendo presiones sobre otros los gobiernistas han logrado ventajas notables hasta en los más rancios periódicos, algunos de los cuales parecen instrumentos de propaganda partidista, en lo que ya se estima como una degradación del periodismo dominicano. Esta semana se llegó al extremo de denunciar como conspirativo un encuentro del candidato del PRD con un grupo de periodistas donde hubo un animado y diverso diálogo sobre las perspectivas electorales y sorprendió el optimismo que mantuvo Mejía.
Al partido morado y su docena de grupos aliados le sobran recursos para sacar un nuevo spot de radio y televisión cada día y hasta para distribuir más de cien mil DVD en uno de los diarios gratuitos. Con mayor eficiencia los peledeístas parecen haber aplastado la maquinaria propagandística de sus competidores, y hace semanas que están llamando uno por uno a los electores para invitarlos a votar por su candidatura, dando seguimiento especial al millón 800 mil posesionarios de las tarjetas de los programas de subsidios gubernamentales.
Desafíos para el PRD
Quedando 6 días de campaña es sorprendente los limitados recursos que ha invertido en propaganda la candidatura perredeísta en una competencia enormemente desigual que ha dejado casi en el anonimato a las otras cuatro candidaturas, víctimas una vez más de la recurrente bipolarización.
Hipólito Mejía se ha batido no sólo contra su contrincante Danilo Medina, que a diferencia de él se ha manejado personalmente con extrema prudencia para no cometer errores. Pero también ha tenido de frente al presidente Fernández y su gobierno, a la primera dama Margarita Cedeño y para colmo hasta al presidente de su propio partido, cuya esposa y los cuadros que le quedan ya hacen campaña abierta en contra de Mejía y a favor del oficialismo.
La ofensiva peledeista gubernamental ha sido tan grande en las últimas semanas que los perredeístas han aparecido a la defensiva, perdiendo la iniciativa. Agotaron temas hipersensibles como el de la tremenda corrupción gubernamental, pero no han sido suficientemente propositivos de correctivos.
Los estrategas perredeístas dicen estar conscientes de que tienen que remachar dando seguridades a los que tienen las tarjetas de subsidios, dirigirse más a las mujeres que favorecen ampliamente al PLD, y enfatizar los temas del empleo, costo de la vida, seguridad ciudadana, reducción del dispendio y promoción de los sectores productivos.
Frente a una mayor avalancha de recursos por parte del peledeísmo, tendrán que apelar finamente, con propuestas específicas, a los sectores inconformes que todavía no acaban de aceptarlos como alternativa válida y donde habrá rechazo al dispendio final.
Es criterio generalizado entre los analistas que para ganarle a una maquinaria con tanta vocación de poder como la peledeísta, y con el arbitraje electoral tan claramente en contra, los perredeístas tendrán que tener una arremetida final de calidad.-