CARTAGENA DE INDIAS, Colombia.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reiteró hoy que la despenalización “no es la solución” para hacer más efectiva la lucha antidrogas y argumentó que la cooperación de su país con Colombia y México en esa materia ha dado resultados positivos.
“La legalización no es la solución”, insistió Obama al clausurar un foro de empresarios en Cartagena (Colombia) antes de la inauguración de la Cumbre de las Américas.
Obama defendió la cooperación con sus homólogos de Colombia, Juan Manuel Santos, y de México, Felipe Calderón, para lograr resultados en ambos países en la lucha contra el narcotráfico. Esos resultados “son la razón por la que seguimos invirtiendo en temas como el Plan Colombia”, anotó el mandatario.
Desde 2001, cuando los entonces presidentes Andrés Pastrana y Bill Clinton firmaron el Plan Colombia, Washington ha otorgado más de 8.000 millones de dólares al país andino para la lucha contra las drogas, con el resultado de una reducción casi a la mitad de la producción de cocaína.
También volvió a reconocer hoy Obama que el problema de las drogas “es de ambos lados”, con la producción en países suramericanos y el consumo en Estados Unidos.
Ante el traslado del problema del narcotráfico a otros países de la región como México, Perú y los centroamericanos, han surgido llamamientos a la despenalización de las drogas, en particular del presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina.
Precisamente hoy se reunieron en Cartagena representantes de los Gobiernos de Centroamérica, algunos de ellos con sus presidentes, a los que se sumaron funcionarios de Colombia y México, para buscar una propuesta común unas horas antes del inicio de la Cumbre de las Américas.
El presidente Santos pidió ‘tender puentes políticos’
“Vinimos a esta cumbre a transformar la realidad”, dijo el presidente Juan Manuel Santos. Y para lograrlo, pidió “tender puentes políticos”, dijo en su discurso inaugural el mandatario colombiano, y puso como ejemplo el restablecimiento de las relaciones entre Colombia y Venezuela, que estaban en crisis al final del gobierno anterior.
“El embargo y el asilamiento a Cuba no se justifica. Es un anacronismo que debió ser superado hace décadas”, dijo Santos y afirmó que “sería inaceptable otra cumbre sin Cuba presente”. “No podemos ser indiferentes a un cambio en Cuba. Es hora de superar la parálisis a la que lleva la terquedad ideológica y llegar a acuerdos por el bien del pueblo cubano”, agregó.
También hizo un llamado para ayudar a Haití en sus problemas de pobreza y a América Central a enfrentar los problemas de violencia.
En cuanto a la violencia en Colombia, aseguró que no le temblará la mano para iniciar un proceso de entendimiento, pero solo cuando se den las condiciones que su Gobierno ha exigido.
Santos fue enfático al referirse a la lucha contra el narcotráfico, diciendo que 100 años después de que se firmara la Convención contra el Opio es oportuno hacer una reflexión. “Hoy resulta oportuno hacer un alto en el camino y hacer una evaluación para establecer dónde estamos y para dónde vamos”, dijo Santos
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