SANTO DOMINGO,RD.-A partir del primer semestre de 2012, los habitantes de la isla Saona contarán con una mini central fotovoltaica generadora de electricidad a base de energía solar para sustituir las plantas eléctricas que utilizan combustibles fósiles.

 

El proyecto fue dado a conocer por la Dirección de Cambio Climático del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, a través de su Departamento de Energía Renovables, con miras de  mejorar las condiciones de vida de dicha comunidad y proteger el medio ambiente en el entorno de esta área protegida.

 

En el año 2009 el Gobierno de la República de China (Taiwán) y el Gobierno de la República Dominicana firmaron un Memorando de Entendimiento para  la implementación de una Solución Fotovoltaica para la electrificación de las áreas comunes de servicios sociales y comunales en la isla, específicamente en el Centro de Atención Primaria, la Escuela Primaria, el Centro de Informática y el Centro de Control y Vigilancia.

 

Sin embargo, la población local, que es de alrededor de 300 personas, recibe energía eléctrica a través de dos plantas generadoras que sólo se encienden por tres horas durante la noche. Esta población, distribuida en 86 viviendas, será beneficiada con el nuevo sistema de energía solar que se instalará en los próximos meses.

 

Con la finalidad de hacer una visita de reconocimiento a la población de Mano Juan en la Saona, los técnicos del Ministerio Ambiente estuvieron en la comunidad acompañados por un representante de la Comisión Nacional de Energía, y representantes del PPS-PNUD.

 

En la visita la comisión se reunió con representantes de la comunidad, los cuales externaron su deseo de lograr realizar un proyecto comunitario, donde se le solucione el problema de suministro de energía.

 

Los sistemas de energía solar fotovoltaica han demostrado sus beneficios en la electrificación rural realizados en todo el mundo, en especial el de los sistemas solares domésticos. Los proyectos para desarrollo de energía a pequeña escala por lo general se diseñan para mejorar la salud pública, proteger el medio ambiente y mejorar la calidad de vida de las poblaciones más pobres, especialmente de las mujeres y niños. Además pueden tener beneficios accesorios, tales como la generación de oportunidades empresariales.