Buscando la subsistencia muchos jóvenes dominicanos han tenido que “engancharse a profesor” con el fin de ganar un salario, que en el pasado utilizaban básicamente para costearse los estudios de otra carrera. Y eran en ese tiempo “profesores trampolín” que utilizaban a Educación para saltar a otra profesión que le garantice un mejor futuro.
Es una vieja práctica que se utilizaba en el pasado, cuando en algunos lugares eran nombrados bachilleres, como profesores, porque el país no contaba con maestros titulados para ocupar todas las plazas disponibles. En ese tiempo esos bachilleres llegaban a Educación con su plan de ir a la universidad a estudiar otra carrera, algunos lograban su objetivo, pero otros se quedaban sin estudiar y seguían dando clases a pesar de que no tenían ninguna preparación.
Con el paso de tiempo y tras la fundación de las llamadas Escuelas Normales, que se dedicaban a la formación de maestros para la educación primaria, se incrementó el número de profesores preparados y con vocación de impartir docencia y eso durante un tiempo frenó la llegada de “profesores trampolín” a sistema educativo, pero no se eliminaron por completo, porque había quienes se iban a las escuelas normales con el fin de que en dos años estarían trabajando en Educación y con ese salaria podrían hacer otra carrera. Para ese tiempo dar clase era un sacrificio, porque el salario de los profesores era muy bajo. Se parecía a los de los guardias y cuando ese muchos se preguntaban con fuerza se casa un guardia y en el caso de los maestros para poder casarse tenía que hacer con una maestra para se juntaron los dos suelditos.
Y como en este país la planificación siempre se queda atrás, las escuelas normales, formaron tantos profesores, que después no había donde nombrarlos y estaban muchos en su casa esperando que se presentara una vacante y esto le quito interés a las escuelas normales que fueron cerradas en el gobierno de Salvador Jorge Blanco.
Y con el cierre de esas escuelas al cabo de un tiempo volvió otra vez el caso de los profesores trampolín, que se incrementó también por la fuga de educadores que renunciaban del sistema por el bajo salario que ganaban los educadores a finales de la década de los 80 y a principios de la década de los 90, para ese tiempo eran contados los profesores que tenían un vehículo, hasta los que tenían motores eran pocos y también eran pocos los profesores que tenían casa propia.
El panorama para los profesores cambió cuando llegó al poder en el 1996, el doctor Leonel Fernández, quien encontró a un profesor de básica ganado 2 mil 328 pesos por tanda (mil 294 pesos de sueldo base más mil 35 pesos de incentivos por tanda) y en el primer aumento el nuevo presidente le llevó el sueldo a 4 mil 148 pesos por tanda (dos 500 pesos el sueldo base y a mil 648 pesos de incentivos). Ese sueldo base se mantuvo igual y solo hubo una variación en los incentivos en el año 1999, cuando el salario aumento a 4 mil 452 pesos por tanda (dos 500 pesos el sueldo base y a mil 952 pesos de incentivos). Y cuando el PLD pierde las elecciones del 2000, son incluidos en la nómina como profesores muchos dirigentes del PLD, que buscaban garantizar su empleo.
El salario de los profesores se incrementó el gobierno de Hipólito Mejía en el año 2001, cuando paso a ser de 4 mil 702 pesos por tanda (Dos mil 750 pesos de sueldo, base más mil 952 de incentivos), y cuando se produjo la devaluación de la moneda en el año 2002, el salario de los profesores para a ser de 4 mil 846 pesos por tanda (Tres mil 600 pesos el sueldo base más Mil 246 pesos de incentivos). En el 2003 el salario del profesor de básica era de 5 mil 248 pesos por tanda (se mantuvo el mismo sueldo base de Tres Mil 600 pesos pero aumentaron los incentivos a Mil 648 pesos), el cual aumentó a 5 mil 721 pesos por tanda (Tres mil 924 pesos el sueldo base, más Mil 797 pesos de incentivos) en el año 2004. Para ese tiempo se incluyeron en nómina muchos dirigentes del PRD como “profesores trampolín”, como una forma de garantizarle el sustento, por la derrota del Presidente Mejía y aunque muchos tenían el propósito de hacer una carrera e irse de educación la mayoría se quedó y se hicieron dirigentes de ADP.
Y con el regreso al gobierno del Doctor Leonel Fernández, lo profesores reciben en el 2005, otro aumento de sueldo y entonces le llevan el salario a 7 mil 437 pesos por tanda (Cinco mil 101 pesos por tanda de sueldo base más Dos mil 336 pesos de incentivos), manteniendo ese monto invariable, hasta el 2007 cuando fue aumentado a 10 mil 120 pesos por tanda (Seis 758 pesos el sueldo base y los incentivos se mantuvieron en Tres mil 336 pesos), mientras que en el 2008 se le aumenta 12 mil 834 pesos por tanda (Siete mil 802 pesos por tanda el sueldo base, más Cinco mil 32 pesos de incentivos), ese salario se mantuvo igual hasta el 2011 cuando fue aumentado a 14 mil 759 pesos por tanda (Ocho mil 973 pesos el sueldo base, más Cinco 786 de incentivos).
Los aumentos de sueldo hecho en el magisterio comenzaron a motivar a muchos jóvenes a que estudiaran Educación, cuya carrera había hasta desaparecido de algunas universidades y se incrementan en todas las universidades los alumnos de Educación, quienes buscan concluir su carrera para buscar un puesto en Educación. Además de mejor salario muchos educadores se beneficiaron de formación, porque el gobierno otorgó becas, en diversas universidades para todos los profesores completaran su licenciatura y realizaron otros estudios especializados.
De acuerdo a cifras del Minerd, del 2012 al 2015 la nómina docente se incrementó en un 122%, es decir, en RD$28,334, 048,484 en términos absolutos. Estos aumentos son los mayores registrados en término de reivindicaciones salariales desde la década de los noventa.
En 2012 un maestro de educación básica devengaba un salario total, que implica sueldo base más Incentivos, de RD$26,259, en 2013 pasó a ser de RD$32,847 y en 2014 de RD$35,633 y en el 2015 de RD$39,909.
“Es decir, de 2012 a 2015 el incremento porcentual del salario al personal docente fue de un 52% por encima del porcentaje de la inflación acumulada del país en el mismo periodo, que fue de un 21.80%”, señala un informe del Ministerio de Educación.
Señala que cuando el Presidente medina llegó al gobierno el salario de un docente dominicano, con dos tandas e incentivos, era RD$26 mil y en 2015 el sueldo es de RD$39,900, una mejora de RD$13,900.
Y ya el Ministerio de Educación y la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) acordaron hacer un aumento a los profesores con los recursos que estaban presupuestados para la evaluación docente del presente año 2017. El incremento será de un 10% y se aplicaría a partir del mes de agosto.
El problema es que el sistema de Educación sigue lleno de profesores trampolín quienes entraron a dar clases por la falta de oportunidad del país. Sin embargo hay otros profesores entregados a su oficio, que viven la enseñanza y a quienes le preocupa el futuro de los niños dominicanos. Es tiempo de poner la casa en orden y de que dar a oportunidad a los que quieren enseñar y hacer que el trampolín salte a los profesores que se engancharon por un tiempo y se ha tenido que quedar en el sistema por cuestiones que solo ellos saben.
Ojala alguien se decida a poner la casa en orden evaluando a los maestros y enviando a su casa a todo aquel que no tiene vocación y que se “engancho” a profesor porque no conseguía otro empleo.
Que me excusen, quienes se sientan afectados, pero para su consuelo, yo también fui un “profesor trampolín”, formado en la Escuela Normal Américo Lugo de San Cristóbal, y que trabaje en Educación para pagar mis estudios universitarios de periodismo, pero una vez complete el objetivo, renuncie para dedicarme a la comunicación que era donde estaba mi vocación. Y quisiera que muchos de los que llegaron al magisterio con ese propósito lo cumplan, porque lo que ha pasado es que muchos que llegaron para irse se han quedado y hoy están cansados y desganados y así no se podrá logar una buena enseñanza.