San Francisco (EE.UU.), 9 sep (EFE).- El consejero delegado de Apple, Tim Cook, presentó hoy el primer reloj inteligente de la empresa, el Apple Watch, que describió como el “dispositivo más personal” que la compañía ha fabricado “nunca”.
El Apple Watch es el primer producto nuevo de Apple desde el lanzamiento del iPad en 2010 y la primera gran apuesta de Cook, que asumió el liderazgo del gigante tecnológico, con sede en Cupertino (California, EE.UU.), en agosto del 2011, pocos meses antes de la muerte del mítico fundador de Apple, Steve Jobs.
El lanzamiento del reloj inteligente era uno de los momentos más esperados de la presentación de este martes y representa lo que Cook describió como “un nuevo capítulo en la historia de Apple”.
El anuncio provocó una gran ovación en el Flint Center de Cupertino, el mismo lugar donde Apple dio a conocer el primer ordenador Mac, en 1984.
Cook aseguró que se trata de un artefacto “muy preciso”, que se puede personalizar para que refleje el gusto y estilo del usuario, al tiempo que es un dispositivo conectado con la salud.
El responsable de Apple aseguró, también, que el reloj no es un iPhone comprimido.
El dispositivo tiene una corona similar a la de los relojes tradicionales que se puede girar para acceder a diferentes aplicaciones.
Fabricantes de móviles como Samsung, LG y Motorola han apostado ya por los relojes inteligentes, un dispositivo que se enmarca en la categoría de informática de vestir y que se ha convertido en un segmento en el que cada vez hay más competencia.
Los inversores de capital de riesgo invirtieron 280 millones de dólares el año pasado en tecnología ponible con biosensores, muy por encima de los 50 millones de dólares de 2011, según la compañía Rock Health, con sede en San Francisco.
Por su parte, la firma de investigación de mercado IDC prevé que se vendan más de 19 millones de dispositivos ponibles en 2014 y que haya 111,9 millones de artefactos en cuatro años.
Apple presentó también este martes la nueva generación de iPhones, que vienen equipados con pantallas más grandes, son más potentes y tienen cámaras con más resolución, así como un sistema que permitirá usar el teléfono para hacer pagos. EFE