Peña estuvo en la ciudad de Lexington como parte de la preselección nacional de baloncesto, que se prepara con miras a la participación del país en el torneo Preolímpico FIBA Américas 2011, a celebrarse del 30 de agosto al 11 de septiembre, en Argentina.
“El tiempo que estuvimos allá, no sólo nos ayudó a pulir nuestras habilidades como jugadores, también sirvió para hacernos mejores personas en muchos aspectos”, destacó. Apuntó que “en esa convivencia se nos enseñó a compartir, a olvidar las individualidades y sobre todo, a sentirnos como una verdadera familia”.
“Calipari fue el encargado de inculcarnos todo eso, haciendo las veces de maestro y mentor del grupo”.
Definió al técnico estadounidense como “una persona excepcional”, con quien han establecido un vínculo afectuoso, tanto dentro como fuera de la cancha”.
“Una muestra de ello es que en Lexington, salimos con Calipari a diferentes a actividades recreativas y hasta nos llevó a cenar a su casa, para que compartiéramos con su familia”, reveló.
Reiteró que “nunca nos habíamos compenetrado de tal forma con un entrenador”.
En cuanto a los entrenamientos, afirmó que “las prácticas fueron excelentes y aprendimos mucho”.