Juan Sangiovanni

A unos 93 kilómetros de distancia al oeste de la ciudad de Santo Domingo, nos encontramos con una de las zonas las más hermosas y exóticas de la República Dominicana: Punta Salinas de Puerto Hermoso, en la provincia Peravia.

Descubierta por el mismo Almirante de la Mar Océana, Don Cristóbal Colón, el 30 de julio de 1502, Punta Salinas está formado por una estrecha franja de tierra que penetra al mar Caribe, y cuya parte más ancha no sobrepasa los 500 metros.

De fácil acceso -solo hay que tomar la carretera Sánchez hasta Baní y luego la carretera Máximo Gómez- Punta Salinas posee dos de las playas más impresionantes de la Región Sur del país, paradójicamente poco visitadas por quienes hacen turismo interno.

La primera, Playa Salinas, se encuentra al final de la carretera Máximos Gómez, a menos de un kilómetro del poblado de Salinas. Área de vientos que se hacen sentir, con aguas tibias y cristalinas, es un lugar ideal para un buen baño y para la práctica de windsurf y el kitesurf.

En esta playa se encuentra el Parador Turístico Punta Salinas. Una estructura de madera y techo de cana que consta de un restaurante con especialidad en mariscos, así como áreas de baile y entretenimiento para niños.

La segunda playa, El Derrumbao, una especie de piscina natural en el Mar Caribe, se encuentra un poco más distante y es necesario caminar alrededor de media hora entre la arena y los salitrales de la zona, o se puede realizar un paseo en bote hasta la misma. Esta preciosísima playa, algo solitaria, es usada principalmente por pescadores de la zona para su actividad diaria.

A menos de un kilómetro del poblado de Salinas, precisamente entre el poblado y playa Salinas, se encuentra una mina de sal marina. Esta se compone de extensas terrazas donde se evapora el agua marina para extraer la sal. Esta mina representa la segunda mayor fuente de empleo de Punta Salinas, después de la pesca.

Debido a su extraña belleza, la luz del lugar al amanecer y al atardecer, esta mina se ha convertido en un lugar favorito de los amantes del arte fotográfico. No es extraño encontrarse en el lugar con fotógrafos aficionados y profesionales realizando sesiones de fotos, aprovechando la atmosfera que crea la mina.

Como opción gastronómica, aparte del Parador Turístico, Punta Salinas cuenta con el restaurante La Cueva del Pirata, un pequeño restaurant situado al final del poblado, justamente donde inicia playa Salinas. Con su especialidad en mariscos, sobresale por sus bajos precios y su vista hacia la Bahía de Las Calderas.

Punta Salinas cuenta además con uno de los mejores hoteles pequeños de la Región Sur del país, El Hotel Salinas. Excelente establecimiento que cuenta con una marina y una terraza al lado del mar, con servicio de restaurante especializado en mariscos.

Una región de una belleza indescriptible que cuenta con atractivos cercanos adicionales como “Las Dunas” de Baní, es una excelente oportunidad de alejarse, aunque sea por un día, del mundanal ruido de la ciudad y disfrutar de una de las zonas menos exploradas del país, como forma de hacer un turismo diferente.