SANTIAGO, RD.- Atendiendo la solicitud del Ministerio Público de Santiago, el Primer Tribunal Colegiado condenó a 60 años de prisión en sumatoria al padre y la madrastra de un niño, ocurrida en la comunidad de Hato del Yaque, en el año 2011.
La sentencia fue dictada contra Juan Ramón Aracena Rosario y su pareja Denny Cruz Rodríguez, quienes fueron hallados culpables de quitarle la vida al menor Benedic Aracena Almonte, de cuatro años de edad, quien falleció luego que éstos le propinaran una golpiza.
La Procuraduría Fiscal de Santiago, que encabeza la magistrada Luisa Liranzo, no solo demostró los hechos cometidos, sino los actos de barbarie y tortura a que era sometido el menor, el cual presentaba signos del síndrome del niño maltratrado.
El tribunal adoptó la decisión luego de ponderar y aceptar como buenas y válidas las pruebas aportadas por el Ministerio Público, quien estableció en el expediente que el menor era sometido castigado frecuentemente a castigos severos, compatibles con actos de barbarie.
El menor falleció mientras era conducido por vecinos al hospital periférico del sector Bella Vista, de la provincia Santiago.
Santiago.- Atendiendo la solicitud del Ministerio Público de Santiago, el Primer Tribunal Colegiado condenó a 60 años de prisión en sumatoria al padre y la madrastra de un niño, ocurrida en la comunidad de Hato del Yaque, en el año 2011.
La sentencia fue dictada contra Juan Ramón Aracena Rosario y su pareja Denny Cruz Rodríguez, quienes fueron hallados culpables de quitarle la vida al menor Benedic Aracena Almonte, de cuatro años de edad, quien falleció luego que éstos le propinaran una golpiza.
La Procuraduría Fiscal de Santiago, que encabeza la magistrada Luisa Liranzo, no solo demostró los hechos cometidos, sino los actos de barbarie y tortura a que era sometido el menor, el cual presentaba signos del síndrome del niño maltratrado.
El tribunal adoptó la decisión luego de ponderar y aceptar como buenas y válidas las pruebas aportadas por el Ministerio Público, quien estableció en el expediente que el menor era sometido castigado frecuentemente a castigos severos, compatibles con actos de barbarie.
El menor falleció mientras era conducido por vecinos al hospital periférico del sector Bella Vista, de la provincia Santiago.
