La intelectual habló en el seminario organizado por el Ministerio de Cultura, luego de dar a conocer el informe de la Primera encuesta de Consumo Cultural en República Dominicana.

 

1(8)Santo Domingo,.- La experta colombiana, Liliana Ortiz,  valoró los avances de la República Dominicana en la conformación del sistema de la Cuenta Satélite de Cultura, al igual que otros países como Brasil, Ecuador, Guatemala, Honduras, México, Perú y Paraguay.

 

Ortiz expuso sobre “Las Cuentas Satélite” en el último día del seminario que concluyó el jueves, “La cultura en las economías emergentes en Iberoamérica”, organizado por el Ministerio de Cultura (MINC) en conjunto con la Organización de Estados Americanos para la Educación, Ciencias y la Cultura (OEI) y el Centro Cultural de España en Santo Domingo (CCESD).

 

En su  presentación, sugirió a las naciones de América Latina que sigan avanzando en la cobertura de todo el sistema de las Cuentas Satélite de Cultura y mejorar la calidad y continuidad de la información.

 

También les aconsejó hacer comparaciones en los países de la región, calculando agregados con la medición estandarizada, establecer metas para que todas las naciones alcancen el estudio más avanzado, y utilizar la información de las Cuentas Satélite de Cultura para el diseño y análisis de las políticas públicas culturales, formulación, ejecución, monitoreo, evaluación y reorientación.

 

Las primeras Cuentas Satélite de Cultura se desarrollaron en Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, España  y Uruguay, y entre las naciones que están en proceso de implementación se encuentran Bolivia, Cuba, El Salvador, Panamá y Venezuela.

 

Saludó que República Dominicana haya avanzado significativamente en la creación de la Cuenta Satélite, lo cual se evidencia con la publicación de los resultados de la “Primera Encuesta Nacional de Consumo Cultural 2014”, publicada el pasado lunes, por el Banco Central y el Ministerio de Cultura.

 

En su extensa exposición “Las Cuentas Satélites de Cultura, Nuevo Manual del Convenio Andrés Bello”, en el Auditorio Juan Bosch de la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña, la experta colombiana abordó los conceptos básicos: línea del tiempo, situación actual, estrategia y proceso para la elaboración de la guía metodológica, estructura y novedades de la guía respecto del manual 2009, así como los desafíos de las Cuentas Satélite en Iberoamérica.

 

Explicó cómo se creó la estrategia  para la elaboración  de la “Guía metodológica para la implementación en Iberoamérica del convenio Andrés Bello”, que se publicará próximamente.

 

Luego, expuso la estructura  metodológica, las novedades que hay en el manual y los desafíos  que han enfrentado con las mediciones culturales. “En toda América Latina, y ahorita se hace extensivo a Iberoamérica, porque todo este proceso solo lo veníamos trabajando con el entorno latinoamericano, pero fue tan fuerte el movimiento en Latinoamérica, que se quisieron sumar también España y Portugal; y muchos países del norte que también no tienen Cuentas Satélite de Cultura se han venido integrando”, detalló.

 

Indicó que Latinoamérica es el primer bloque regional que se lanza como una propuesta, para el resto del mundo, en los temas culturales. “Ustedes escuchan tanto de las Cuentas Satélite y piensan que parece una cosa espacial, fuera de la atmósfera, en otra orbita, pero no es más que hacer las mediciones. O sea, aglomerar unas cuentas que nos digan algo para poder tomar decisiones, eso es lo fundamental de las Cuentas Satélites de Cultura”.

 

Nombró los cuatro modelos básicos que adoptan los economistas para entender la cultura: “bienestar”, “neutral”, “crecimiento” y “evolutivo”, y dijo que “cuando vayamos a pensar nuestras políticas culturales y cuando vayamos hacer nuestros procesos, también tenemos que reconocer que no hay un solo paradigma, sino que hay varios”.

 

Sin embargo, entiende que el objeto de estudio de las Cuentas Satélite se debe valorar a partir del concepto formulado por la UNESCO, que reconoce la cultura como un conjunto de actividades humanas y sus manifestaciones o elaboraciones, cuya razón de ser consiste en la creación, producción, difusión, transmisión, consumo y apropiación de contenidos simbólicos relacionados a las artes y el patrimonio.